La calle 64 con carrera Sexta b de Ibagué, es uno de los puntos más transitados de la ciudad, ya que a través de ella se accede a varios sectores como Prados del Norte, Millenium, Los Ocobos, Parrales, Yacaira, entre otros.
Cerca a esa arteria vial está ubicado uno de los centros comerciales más grandes de la capital tolimense, restaurantes exclusivos y decenas de proyectos de vivienda que han dinamizado la economía de esta zona comercial.
Sin embargo, a pesar de que el sector tiene un acelerado crecimiento, el mal estado de esta calle amenaza con causar una tragedia.
De acuerdo con el ingeniero civil Juan Diego Bejarano, el tramo podría colapsar en cualquier momento debido a su mal estado. A simple vista se pueden ver algunas deformaciones en el asfalto, sin embargo, por debajo de la vía hay graves afectaciones causadas por un daño en la tubería que está socavando la estructura del pavimento.
“Eso se debe al mal estado de la red de alcantarillado, que presenta fugas de agua y lo que hace es generar un lavado de partículas finas que van debilitando la estructura de la vía. Eso produce una cárcava en la parte inferior de la carpeta asfáltica, que pone en riesgo la integridad de los transeúntes”, explicó el profesional.
Para Bejarano, el riesgo se incrementa, toda vez que la calle queda justo al frente de la zona de descargue del supermercado Metro en donde transitan vehículos de carga pesada, la mayoría de veces.
“Los vehículos que descargan en ese lugar, generalmente superan varias toneladas de peso. Llegará el día en que esa vía no soporte y colapse. Si no se atiende el problema de manera inmediata el tema podría terminar en un hueco gigante con un carro ahí adentro”, dijo Bejarano.
Por el problema, adicionalmente se han generado huecos y montículos en la vía que han hecho accidentar a varios motociclistas.
“Varios motociclistas se han caído en esa parte porque la carretera tiene unos montículos horribles. Nos da miedo que eso se caiga cuando uno menos piense”, dijo Camila Pardo, habitante del sector.
EL OLFATO se trató de comunicar con la secretaria de Infraestructura encargada de Ibagué, Paola Beltrán, pero no respondió los mensajes.
Por su parte la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado, Ibal, anunció una intervención en el mes de mayo.
Mientras tanto, la comunidad sigue a la espera de que solucionen el problema lo más pronto posible antes de que sea demasiado tarde.