Usted podría sufrir de hígado graso y no saberlo

El sobrepeso y los malos hábitos alimenticios pueden provocar hígado graso, una afectación que generalmente no presenta síntomas, pero que si no es detectada y tratada a tiempo podría desembocar en una cirrosis o, en el peor de los casos, en cáncer.

Según el doctor Gustavo Reyes, médico gastroenterólogo adscrito a la EPS Colsanitas, el hígado graso se presenta cuando, por el consumo de alimentos poco saludables, se forma una infiltración del tejido hepático, específicamente de las células.

Hay tres causas principales: en primer lugar, el sobrepeso y/o obesidad; tener colesterol o triglicéridos altos y, finalmente, la diabetes”, comenta el especialista. Sin embargo, el alcohol también puede estar asociado a esta condición.

“Generalmente es asintomático. Algunas veces hay molestias inespecíficas en la parte abdominal superior derecha, aunque esto no es frecuente. Por este motivo, su diagnóstico se hace a partir de una ecografía de abdomen o del hígado para conocer el estado de este órgano con precisión”, manifiesta el doctor Reyes.

La buena noticia es que el hígado tiene la capacidad de regenerarse si se toman las medidas preventivas y/o correctivas a tiempo. Por este motivo, los especialistas sugieren que llevar un estilo de vida saludable en el que se restrinja el consumo de grasas y comida chatarra contribuye a la recuperación de dicho órgano vital.

“Tener una alimentación balanceada, rica en frutas, vegetales y fibra, baja en grasa y harinas. Además, mantener un peso adecuado, hacer ejercicio y moderar la ingesta de alcohol. Sumado a esto, se debe llevar un control del colesterol y triglicéridos en la sangre, y quienes sufran de diabetes seguir las recomendaciones pertinentes”, agrega el especialista.

Las consecuencias de descuidar esta condición pueden ser graves para la salud, ya que el hígado puede terminar sufriendo una cirrosis. “Esta última es una enfermedad que se presenta, por lo general, en las personas que consumen alcohol muy seguido, pero el hígado graso también puede generar una cirrosis”, comenta.

“Hay consecuencias para la salud muy graves, entre ellos el riesgo de cáncer de hígado que sería el nivel más complicado”, dice el especialista. Entonces, es necesario que las personas se hagan chequeos continuos y sigan las recomendaciones de los médicos.

En el caso de quienes sufren de sobrepeso u obesidad, reducir su talla puede ser vital, no solo para mejorar la salud de su hígado, sino para prevenir otro tipo de patologías que se producen por el exceso de peso. (Ver: Obesidad aumenta el riesgo de padecer hasta ocho tipos de cáncer)

Por: REDACCIÓN SALUD

Foto: elolfato.com/ hernando bazurto

Fecha: viernes - 25 noviembre - 2016