Profamilia realizó 610 abortos legales en el Tolima desde el año 2012 hasta septiembre de 2017. De este total, cerca del 20 % corresponde a procedimientos realizados a mujeres entre los 20 y 35 años en Ibagué, quienes decidieron interrumpir su embarazo por complicaciones de salud física y psicológica.
Así lo informó Nancy Reina, directora de Profamilia en el Tolima, quien indicó que estos resultados obedecen a la campaña ‘La decisión es tuya, en lo que sigue te acompañamos’, promovida por la entidad para informar a las mujeres sobre los tres casos en los cuales se puede interrumpir un embarazo de manera legal en el país, y los riesgos que trae abortar en sitios no especializados.
De acuerdo con la directora, «la idea es hacer un acompañamiento psicológico y médico ante la interrupción del proceso de gestación para que las mujeres no se dirijan a lugares clandestinos. Además, garantizar servicios de anticoncepción a largo plazo para evitar nuevos embarazos no deseados”.
Para este fin, la entidad empezó a utilizar un medicamento aprobado en 2016 por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, que ofrece una eficacia del 95 %, lo que hace más segura la práctica del aborto. (Ver: Invima autoriza a Profamilia comercializar tratamiento para la interrupción del embarazo)
Este procedimiento implica menos efectos secundarios y mayor seguridad para las mujeres, ya que es menos invasivo y reduce el sangrado en el posparto.
«Este programa trabaja por el reconocimiento de los derechos sexuales y reproductivos, especialmente por el derecho a la autonomía reproductiva de la mujer», señaló Reina.
Cifras del aborto en Colombia
En el 2006 la Corte Constitucional permitió el aborto inducido en tres ocasiones: en caso que peligre la salud física o mental de la mujer, cuando hay una malformación que hace inviable la vida del feto fuera del útero, y/o cuando es producto de violación o incesto.
Sin embargo, según la Encuesta Nacional de Demografía y Salud 2015, sólo el 5.1 % de las mujeres conoce estos tres casos, razón por la que el 53% de las colombianas que se dirigen a lugares clandestinos para interrumpir su embarazo, requieren atención médica de urgencia por las complicaciones que se presentan en los procedimientos.
Según cifras del Instituto Guttmacher, en Colombia cada año cerca de 400.000 mujeres abortan en la clandestinidad.