Radican escrito de acusación contra segundo cabecilla del cartel de los ‘Narcobuses’

La Fiscalía radicó el escrito de acusación por los delitos de lavado de activos y concierto para delinquir en contra de José Omar Araque Ortiz, señalado como el presunto segundo cabecilla del llamado cartel de los ‘Narcobuses’.

Este hombre hacía parte de la organización Los Mercaderes de La Frontera, impactada en agosto pasado en Ibagué, por estar presuntamente relacionado con la media tonelada de marihuana que quedó al descubierto, luego que un bus de servicio turístico se accidentara en la frontera con Ecuador, cobrando la vida de más de 20 personas. (Ver: Desde Ibagué se coordinó envío del ‘narcobús’ a Ecuador)

De acuerdo con las autoridades, Araque Ortiz fue otro de los financiadores del cargamento que tendría como destino final Chile, y que desde julio de este año venía hablando con Jesús David Santofimio, líder principal de la organización y otras personas de Cali (Valle del Cauca), sobre un negocio grande para el tráfico de estupefacientes a gran escala.

Junto a él, la Fiscalía busca acusar formalmente por los delitos de concierto para delinquir y tráfico de estupefacientes agravado a Jairo Espinoza Méndez, principal proveedor en Ibagué de sustancia estupefaciente (a quien se le encontró en su casa 11 kilos 938 gramos de cocaína); Ana Lucía Salamanca Mendieta, expendedora; Erika Tatiana Nieto Tinoco, distribuidora; y Lina Ximena Pinzón Cárdenas, esposa de Espinoza Méndez, quien también se dedica a la distribución. (Ver: Cuatro implicados en caso de ‘narcobús’ fueron enviados a prisión y dos más recibieron casa por cárcel)

Éstos están siendo señalados por un despacho adscrito a la Unidad Regional Antinarcóticos con sede en la capital tolimense de pertenecer a la estructura Los Mercaderes del Sur, dedicada al tráfico de sustancias estupefacientes al por mayor, en diferentes municipios de Tolima, Huila y Valle de Cauca.

El material probatorio recaudado por la Fiscalía, como interceptaciones y seguimientos, permite inferir que el grupo delictivo, que comercializaba base coca (pasta y polvo) y marihuana cripy, tenía una estructura funcional para realizar la dosificación y distribución de los alucinógenos, que acopiaba en un laboratorio clandestino ubicado en el barrio Varsovia de Ibagué, sede principal de su actividad ilícita.

Por: REDACCIÓN JUDICIAL

Foto: EL OLFATO

Fecha: jueves - 13 diciembre - 2018