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La plenaria de la Cámara de Representantes fue aprobado el proyecto que pretende limitar los cobros por retiros en cajeros electrónicos. Esto significa que se acabará la cuota cobrada por los bancos a sus usuarios cuando realizan esta operación bancaria.
No obstante, el usuario podrá tener este beneficio siempre y cuando los retiros se hagan en la misma ciudad en la que tiene su domicilio.
Es decir, si el consumidor realiza transacciones destinadas hacia otra parte del país, la entidad bancaria sí le descontará que tenga establecida para este servicio.
El promotor de este proyecto fue Samuel Hoyos, quien explicó que el objetivo es que las personas con cuentas de ahorro con promedios inferiores a los tres salarios mínimos no paguen por estos retiros.
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Asimismo, se espera que el usuario no pague por estos retiros en otros bancos distintos al que tiene la cuenta.
Ahora solo falta que la discusión se traslade al Senado donde debería ser aprobado, ya que esta es una medida que beneficia a los consumidores del sistema financiero.
