Por usar dineros públicos para viajar, Contralor (e) podría haber incurrido en peculado: Wilson Leal

Después de que se conociera que el Contralor encargado de Ibagué, Diego Mauricio Visash Yepes, tuvo que devolver $4 millones que se había gastado en un viaje que no tenía nada que ver con el ejercicio de sus funciones, el reconocido abogado administrativo Wilson Leal habló con ELOLFATO.COM y dijo que el jefe del control fiscal de la ciudad podría haber incurrido en alguna de las modalidades de peculado.

Según Leal, el solo hecho de que Visash Yepes haya decidido devolver los recursos públicos que se gastó en un viaje a Cartagena ya pone de manifiesto que se trata de un hecho cuestionable que puede ser relevante desde el punto de vista penal y disciplinario. (Ver: Contralor (e) de Ibagué tuvo que devolver $4 millones de un viaje que no tenía que ver con sus funciones)

«Yo no conozco de manera detallada los documentos, pero lo que sí puedo decir es que apropiarse de unos dineros públicos o permitir que otros lo hagan es un peculado y eso tiene distintas modalidades: culposa, por aplicación oficial diferente. Creo que es relevante el hecho de efectuar unos gastos que posteriormente se ve precisado a devolver. Esto en la consideración de que ese es un hecho cuestionable, pues implica una trascendencia desde la óptica penal y disciplinaria«, dijo Leal.

Asimismo, Leal dijo que el comportamiento irregular de Visash Yepes no se repara simplemente con devolver los recursos, puesto que la conducta inadecuada ya fue realizada y no por ello se puede pretender que el posible peculado no haya existido. (Ver: El Contralor (e) de Ibagué salió más viajero que su antecesor Edwin Riaño)

Leal afirmó que en Ibagué ya existen antecedentes relacionados con el gasto indebido de recursos por parte de un Contralor, pues el señor Jorge Eleazar Devia, quien estuvo al frente de la Contraloría Municipal hace 16 años, fue destituido y vinculado a una investigación penal por haberse gastado dineros públicos para pagarse sus estudios en Bogotá.

«Antecedentes en esa materia hay. Sin embargo, creo que estamos hablando de una circunstancia que es relevante, que no puede pasar inadvertida tratándose, precisamente, de quien debe cuidar los dineros públicos. Y si esa persona, que debe tener ceñido su comportamiento a los más altos estándares, viene a darse cuenta después de haber incurrido en un gasto que debió haberlo devuelto, eso significa que esa derogación no debió haber ocurrido«, afirmó Leal.

Leal también dijo que los millonarios viáticos de Visash Yepes empeoran la imagen que tiene la Contraloría Municipal, una entidad que se ha destacado por los pocos resultados que ha entregado en materia de lucha contra la corrupción en los últimos años. (Ver: Contralor (e) de Ibagué justifica los $32 millones de viáticos que ha recibido en cuatro meses)

«Creo que estamos hablando de un hecho que es censurable y negativo en el balance institucional de la Contraloría. Eso tiene que expresarse en términos de las investigaciones de los organismos de control, pero yo pienso que esas entidades, empezando por la Contraloría, tienen un balance institucional muy discutible en la ciudad de Ibagué«, manifestó el abogado.

De igual modo, Leal afirmó que tanto el Concejo Municipal como el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo tienen responsabilidad en este asunto, ya que ambos tuvieron que ver con la designación de Diego Mauricio Visash Yepes como Contralor encargado de Ibagué. (Ver: Ibagué se quedó sin Contralor y encargan a una persona con poca experiencia pública)

«A los concejales se les dijo que la persona a la que estaban postulando (Ramiro Sánchez) y con quien tenían sus acuerdos políticos estaba inhabilitada. Eso originó entonces suspensión del Contralor. Y el señor Alcalde entonces encarga a un Contralor y resulta que quien dirige la administración pública municipal elige a quien tiene que controlar. ¿Qué tipo de independencia puede tener una persona como estas cuando tiene que pagar el favor de sus designación?«, dijo.

Y concluyó: «Me parece que la ciudad está sumidad en una desgracia infinita, a propósito de esta debacle de los organismos de control en Ibagué. Desde el punto de vista del control, Ibagué es una ciudad sin dueño, es una ciudad completamente abandonada a su suerte«.

Por: SEBASTIAN MATEUS

Foto: elolfato.com/hernando bazurto

Fecha: martes - 4 octubre - 2016