La hipertensión es conocida por ser un enemigo silencioso que en la mayoría de los casos no presentan síntomas. Por esta razón, los expertos recomiendan realizar controles periódicos y estar atento a cualquier síntoma.
Esta enfermedad se produce cuando los vasos sanguíneos tienen una tensión alta de manera persistente, situación que puede dañarlos.
Cada vez que el corazón late bombea sangre a los vasos, que llevan la sangre a todas las partes del cuerpo. La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada por el corazón; cuanto más alta es la tensión, más esfuerzo tiene que realizar el corazón para bombear.
Una persona con hipertensión puede sufrir insuficiencia cardiaca, angina de pecho e infarto de miocardio, también se pueden ver afectados otros órganos como los riñones, produciendo insuficiencia renal, pérdida de agudeza visual y afectar al sistema nervioso produciendo hemorragia cerebral o una trombosis.
¿Cuáles pueden ser los síntomas?
Aunque en la mayoría de los casos no se presentan síntomas, esté atento a las siguientes señales:
- Fuerte dolor de cabeza.
- Náuseas o vómito.
- Cambios en la visión.
- Sangrado nasal.
¿Cómo puede prevenirla?
Existen factores que predisponen la aparición de esta enfermedad:
- Antecedentes familiares de presión alta.
- El embarazo.
- La obesidad.
- Consumo excesivo de sal.
- Fumar y beber bebidas alcohólicas en exceso.
- El estrés y la ansiedad.
Tomado de: www.supersalud.gov.co