El concejal Humberto Quintero y el diputado del Tolima, Jairo Forero, le pedirán al gobernador Luis Carlos Delgado que someta a un juicioso estudio jurídico el polémico Acuerdo ‘chaleco’ que aprobó el Concejo de Ibagué para favorecer las cuentas personales del exsenador y propietario del Club Deportes Tolima, quien no pagará impuestos en la ciudad durante 10 años.
Camargo no pagará el impuesto de Industria y Comercio, tampoco hará aportes a la ciudad por la publicidad que explota en el estadio Manuel Murillo Toro ni por la venta de camisetas y mucho menos por la negociación de sus jugadores. A cambio, regalará 300 boletas y creará escuelas de formación deportiva. (Ver Millonario regalo de la Alcaldía de Ibagué a Camargo)
Para el concejal Quintero, uno de los cuatro que votó en contra, este Acuerdo es un verdadero “adefesio” que se inventaron las mayorías del Concejo con el aval del alcalde Luis H. Rodríguez para complacer al dirigente deportivo, en detrimento de las finanzas públicas.
“No creo que sea legal un Acuerdo hecho a la medida de una sola persona. Nosotros llegamos al Concejo de Ibagué para favorecer intereses generales y no particulares”, resaltó.
Por su parte, el diputado del partido de La U, Jairo Forero, manifestó que es necesario que departamento jurídico de la Gobernación del Tolima evalúe detalladamente la legalidad de esta decisión que traerá beneficios de más de 1.200 millones de pesos a un particular.
“Es muy triste que la Alcaldía de Ibagué y el Concejo hagan este tipo de favores a un inversionista privado y no exoneren del pago de impuesto predial, sólo por cinco años, al hospital Federico Lleras Acosta”, aseguró Forero. (Ver Beneficiaron el bolsillo de Camargo y castigaron las cuentas del Federico Lleras)
Es poco probable que se le atraviesen a Camargo
La gran pregunta que surge ahora es: ¿El gobernador Luis Carlos Delgado se atreverá a atravesarse al Acuerdo ‘chaleco’ para su amigo Gabriel Camargo?
Es poco probable que esto suceda. Don Gabriel, hace décadas, aprendió a manejar a los funcionarios públicos del Tolima y también a algunos periodistas deportivos de la región.
Con su poder logra someter a todo el departamento cada vez que amenaza con llevarse a su equipo. Apenas hace sus históricos amagues, alcaldes y gobernadores corren hasta su oficina en Bogotá a ofrecerle que use el estadio sin contrato de arrendamiento, patrocinios públicos, descuentos tributarios y hasta le compran las boletas para que se quede aquí.
También, para mantenerlo contento, le ofrecen homenajes y condecoraciones tanto en el Concejo de Ibagué como en la Gobernación del Tolima, como se evidencia en las fotografías divulgadas por la administración departamental.
Fotos: Gobernación del Tolima