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Gustavo Petro, el candidato de la Colombia Humana, negó a través de su cuenta de Twitter que la propuesta que hizo en medio de un discurso en Yumbo, Valle, donde insinuaba que le pediría al empresario Carlos Ardila Lülle que le vendiera una hacienda productora de caña para regalársela “al pueblo”, significara que iba a expropiar al empresario.
Esto, después de que su contrincante por la presidencia, Germán Vargas Lleras publicara, por este mismo medio lo siguiente: “Ayer el Dr. Petro le pidió a Ardila Lülle que le venda Incauca, muy provocador como de costumbre. Le recuerdo: la Constitución colombiana protege la libre empresa y la propiedad privada. Su propuesta está peligrosamente cerca de la expropiación así lo niegue un millón de veces”.
De hecho, Petro argumentó en su respuesta, que él (Vargas Lleras) sí había expropiado a los colombianos de una empresa que no querían vender, exponiendo el caso de Isagen.
No doctor @German_Vargas mi propuesta no está cercana a la expropiación, sólo es una compra voluntaria en cambio usted si expropió a la sociedad colombiana de Isagenl, que la sociedad no quería vender. https://t.co/gD6Cn6iexY
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— Gustavo Petro (@petrogustavo) 27 de abril de 2018
Esta polémica se generó a partir del discurso que Petro dio en medio de su visita por el Valle del Cauca, donde aseguró que “si Ardilla Lülle da un paso hacia un pacto social, ya él convertido en uno de los grandes empresarios históricos de este país, para sentar las bases de esta sociedad de paz, hacia adelante; bonito sería el gesto: que decidiera una vez la Colombia Humana sea gobierno en Colombia, vender su hacienda de Incauca al Estado para que el Estado la entregue al pueblo campesino y al pequeño y mediano productor agrario para producir alimentos e industrializarlos en Colombia”.
