Ibagué es referente de iniciativas que le apuestan al fomento de la cultura ciudadana y el goce del espacio público, sin embargo, la capital tolimense todavía cuenta con mobiliario que se encuentra en completo estado de abandono y no responde a estas expectativas. Este es el caso de los paraderos de buses que se encuentran distribuidos por la ciudad, los cuales completan tres años en condiciones deplorables.
Pese a que desde mediados de 2017 la Gestora Urbana adelantó los procesos contractuales para adjudicar el contrato que permitiera dar inicio a las obras de mantenimiento y adecuación de los 48 paraderos de buses con que cuenta Ibagué, solo hasta mayo de este año se suscribió el contrato por $157 millones de pesos con la empresa 3-60 Ltda. para dar trámite a estas obras.
Sin embargo, cinco meses después de la suscripción del contrato, todavía es evidente el mal estado y deterioro de muchos paraderos, especialmente los que se encuentran ubicados a lo largo de la carrera Quinta. (Ver: Vándalos han destruido más de 10 paraderos de buses de Ibagué)
De los 48 paraderos con que cuenta la ciudad, 10 se encontraban en buen estado al momento de ejecutarse el contrato. No obstante, de los 38 restantes, apenas 25 han sido reparados, es decir, que aún faltan 13 por arreglar.
Grafitis, maleza y vidrios rotos generan un ambiente de abandono y percepción de inseguridad entre los ibaguereños que a diario concurren a estos lugares para abordar el transporte público.
Al indagarse a la Gestora Urbana sobre los motivos que han impedido dar cumplimiento oportuno a estas labores, Herman Valencia, gestor encargado, indicó que los retrasos para finalizar la total reparación y entrega de estos mobiliarios obedece a “algunos incumplimientos parciales por parte del contratista encargado”.
“Por parte de la entidad hemos incurrido en hacer requerimientos de incumplimiento, los cuales han sido acompañados por parte de la aseguradora que generó las pólizas y garantías para este contrato. Él está en la tarea de terminar con el mantenimiento y arreglo de estos paraderos”, explicó Valencia. (Ver: Sancionarán a pasajeros y conductores que no usen los paraderos públicos de buses de la Quinta)
Ante la posibilidad de que el incumplimiento por parte de la empresa 3-60 Ltda. pueda llevar a la liquidación del contrato, situación que obligaría a iniciar un nuevo proceso contractual, Valencia dijo que se estableció el próximo 15 de octubre como fecha límite para entregar las labores de recuperación de los paraderos.
Falta de cultura ciudadana y otros inconvenientes
EL OLFATO estableció comunicación con la empresa 3-60 Ltda., quienes argumentan que los retrasos obedecen a los recurrentes actos de vandalismo a los que están expuestos los paraderos.
De hecho, ante la Gestora Urbana hay reportadas 20 denuncias por vandalismo contra estos mobiliarios, siendo los actos más recurrentes los grafitis y el rompimiento de los vidrios.
Otro de los inconvenientes, según dijo Eisen Muñoz, representante legal de la empresa, tiene que ver con las dificultades para que las personas se interesen en pautar en los denominados ‘mupis’ dispuestos en los paraderos. Al visitar varios de estos se evidenció que permanecen vacíos y llenos de grafitis.
“Ha habido mucha resistencia frente al tema pero nosotros estamos haciendo todo lo posible, primero, para arreglar la infraestructura del municipio y segundo, aclarar que estamos cumpliendo ante la gestora con el alquiler. Estamos pagando $2’500.000 de energía mensual y de alquiler estamos pagando $4’300.000 a la Gestora, dinero que aún no hemos visto reflejado en la venta de la publicidad”, subrayó Muñoz.
Entre tanto, no queda claridad sobre si se podrá contar con la totalidad de las obras para la fecha pactada, si se tiene en cuenta que el 15 de octubre está a la vuelta de la esquina y aún faltan 13 paraderos por reparar. (Ver: Jaramillo dice que exalcaldes impidieron ejecución del Sistema Estratégico de Transporte Público en Ibagué)
Según explicó Muñoz, las obras podrán ser entregadas a tiempo siempre y cuando Enertolima e Infibagué otorguen las autorizaciones de energía eléctrica y operación de técnicos para los arreglos correspondientes, toda vez que estas labores implican romper los andenes y cambiar el cableado.
Por lo pronto, mientras los paraderos son reparados y puestos en buenas condiciones para el bienestar de los ibaguereños, la Gestora hizo un llamado a la ciudadanía para que cuide estos escenarios y denuncie hechos que atenten contra el mobiliario de la ciudad.