Levantarse un domingo sin agua, con una temperatura que superaba los 28 grados centígrados y al mismo tiempo ver cómo se desperdiciaba el vital líquido por un daño en la red del IBAL, llenó de desespero a los habitantes del barrio Pedregal.
Muy temprano llamaron a las líneas de atención al usuario del IBAL pero como no les contestaron decidieron bloquear una calzada de la avenida Ambalá. Instalaron llantas, piedras y, otros de manera simbólica, protestaron bañándose en plena calle.
Algunos vecinos se fueron a recoger agua mientras un hombre mayor, poco bronceado, se puso la pantaloneta y con la popular ‘totuma’ disfrutó de un baño al aire libre.
Hombres de la Policía Metropolitana lograron despejar la vía y habilitar el paso, y después llegaron los funcionarios del IBAL para atender la emergencia que se presentó a pocos metros de la vivienda del gerente de la empresa, Carlos José Corral.
Lo ocurrido en el barrio Pedregal muestra el cansancio de los ibaguereños por las constantes interrupciones en la prestación del servicio de agua potable y muy seguramente se seguirán presentando bloqueos viales.
Hace apenas tres semanas fueron los habitantes del sector de El Poblado, en la vía a Picaleña, los afectados con un corte de más de tres días. A ellos tampoco les contestaron en el IBAL.
Este fue el tubo que generó el prolongado corte. El IBAL terminó la reparación casi a las 3:00 de la tarde, según informó a través de su cuenta de facebook.