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Al parecer las personas casadas tienen menos posibilidades desarrollar o morir de una enfermedad cardiaca que los solteros, reveló un estudio que publicó la revista Heart.
En resumen, los resultados sugieren que, en comparación con quienes están en matrimonio, los adultos que están divorciados, son viudos o nunca se han casado tienen 42% más de posibilidades de desarrollar una condición cardiaca y 16% más de probabilidad de padecer una enfermedad de la arteria coronaria.
El estudio menciona que existen diversas teorías sobre la razón por la que el matrimonio puede tener dicho efecto y resalta el hecho que al vivir en pareja, la otra persona aporta a estar más pendiente de la salud de su cónyuge, lo que puede permitir un reconocimiento más temprano de los problemas médicos y, a su vez, ayudan a que los pacientes tengan mejor adherencia a los tratamientos, mayor seguridad financiera y mayor bienestar.
La investigación empleó 34 estudios de 225 publicados entre 1963 y 2015 en los que, en conjunto, habían participado más de dos millones de personas de entre 42 y 77 años procedentes de Europa, América del Norte, Oriente Medio y Asia.
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Cabe resaltar que los estudios empleados en el análisis no incluían información sobre parejas del mismo sexo, ni sobre la calidad del matrimonio o las posibles diferencias entre vivir con una persona y estar casado.
