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Ibagué ha estado entre las cinco capitales de Colombia con más suicidios y, muy seguramente, se mantendrá en este penoso grupo.
La debilidad institucional y la ausencia de estrategias públicas de prevención son evidentes. Sin embargo, la prensa local también podría tener una alta responsabilidad en esta trágica ‘epidemia’.
Aquí los suicidios se convirtieron en un espectáculo informativo para algunos. Las escenas de la fatal noticia se describen amplia y detalladamente, y si es posible transmiten en vivo y en directo el momento en el que los funcionarios del CTI de la Fiscalía realizan los levantamientos.
Decenas de estudios científicos, desde 1774, han sustentado el riesgo que tiene para la sociedad la divulgación de este tipo de informaciones porque podrían desencadenar una línea de conducta suicida.
“Una de las primeras asociaciones conocidas entre el suicidio y los medios de comunicación surgió de la novela de Goethe “Leiden des jungen Werther” (Las Penas del Joven Werther) publicada en 1774. En esta obra, el héroe se dispara luego de un amor infortunado, y poco después de su publicación, se informó acerca de muchos varones jóvenes que usaron el mismo método para cometer suicidio. Esto resultó en la prohibición del libro en varios lugares. De ahí el término “efecto Werther” usado en la literatura técnica para designar la imitación en los suicidios”, describe un documento recopilado por la Organización Mundial de la Salud. (Ver: estudio)
EL OLFATO consultó a importantes periodistas de Colombia y el mundo sobre el manejo que deben tener las informaciones relacionadas con los suicidios en ciudades como Ibagué donde las dramáticas estadísticas muestran que niños, desde los 11 años, se están quitando la vida.
Algunos medios han optado por no publicar estas noticias y otros sólo lo hacen cuando detrás de esta fatal decisión hay un hecho informativo de interés general.
Martín Caparros: El respetado periodista argentino, un verdadero referente en la prensa mundial, sostiene que él no divulgaría los suicidios que se registran semana a semana en una ciudad sino que se ocuparía de realizar un análisis a la problemática y explicar por qué se podría estar presentando este fenómeno.
Dijo que si los medios deciden publicar estos contenidos, “que lo hagan de la manera más reflexiva” y puso como ejemplo el periódico El País de España que decidió no divulgar informaciones de suicidios.
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Fidel Cano: El director de El Espectador afirmó que aunque no hay una directriz editorial definida, ellos sólo divulgan casos de suicidios cuando detrás de este hecho hay un contenido informativo. Por ejemplo, mencionó la denuncia sobre el suicidio del niño Sergio Urrego, quien acabó con su vida por las presiones que recibió en su colegio por su condición sexual.
“Ahí la noticia no era el suicidio sino la discriminación de que había sido objeto en su colegio por ser homosexual”, aseguró el director de EL Espectador a EL OLFATO.
Finalmente, recomendó ir más allá de “la excitación” informativa de transmitir un suicidio y profundizar en qué está pasando en la ciudad.
Antonio Rubio: El director de investigaciones del diario El Mundo de Madrid coindice con Fidel Cano en el sentido de que cuando detrás de un suicidio hay un hecho informativo de interés general podría divulgarse en los medios de comunicación. De lo contrario, no.
Explicó, que así como diariamente mueren personas por enfermedades como cáncer, no necesariamente los medios tendrían que reportar estos fallecimientos en las primeras páginas o en los espacios radiales.
Carlos Alberto Giraldo: El jefe de investigaciones y columnista de El Colombiano de Medellín manifestó que este importante diario decidió, hace más de 20 años, no divulgar los suicidios que se presentan en Antioquia porque reconocen que riesgo de salud pública que tiene la publicación de estas noticias.
EL OLFATO respeta la decisión editoral de cada medio de comunicación en Ibagué, pero preferimos abstenernos de publicar casos dramáticos como el ocurrido este miércoles en la ciudad, debido a que podría motivar a otras personas a seguir el mismo camino.
