¿La primera irregularidad del nuevo Concejo de Ibagué?

El concurso de méritos para elegir al próximo Contralor de Ibagué se parece a una carrera de carros en la que, en la última vuelta, se decide que el ganador no es quien llega primero a la meta sino quien tenga más gasolina al final de la competencia. Aunque en este caso no se trataría de gasolina sino de ‘mermelada’, o para decirlo sin rodeos, con puestos para repartir.

Eso parece estarle pasando a Marcela Jaramillo, quien obtuvo el mayor puntaje de calificación del concurso que hizo el Concejo Municipal, a través de la Corporación Unificada Nacional de Educación Superior (CUN), y que, de acuerdo con las reglas de juego establecidas por la reciente reforma al equilibrio de poderes, debería ser la próxima jefe del ente fiscalizador de Ibagué.

Sin embargo, hábilmente, los nuevos concejales decidieron modificar a última hora las condiciones para ocupar el cargo, y darle “un chance” a quienes no les alcanzó para llegar de primeros, pero que tienen el tanque lleno de combustible.

De acuerdo con la decisión del cabildo, la elección dependería, ya no de los requisitos establecidos para el concurso ni de la lista de elegibles, sino de la decisión de los concejales. Es decir: cambiar todo para que todo siga siendo igual y los partidos puedan mantener vivos a sus jugadores.

PicMonkey Collage

ELOLFATO.COM conoció que el elegido de la alianza entre el Partido Liberal y Cambio Radical sería Ramiro Sánchez (Der), quien obtuvo el tercer lugar, y está 10 puntos por debajo de la ganadora del concurso de méritos, Marcela Jaramillo (Izq).

Marcela Jaramillo, actual personera delegada para la Vigilancia Administrativa, logró una calificación 83,1 sobre 100. El segundo puesto fue para Ariel Medina, docente universitario, con un puntaje de 73,7. Después, en el tercer lugar, aparece el candidato de los concejales: Ramiro Sánchez, exdirectivo de la ESAP, quien alcanzó una puntación final de 73,3. Y cierra, en el cuarto puesto, el candidato del barretismo, Luis Gabriel Pérez, excandidato a la Alcaldía de Cunday, con 73 puntos. (Ver resolución con la puntuación final del concurso)

La modificación de las reglas de juego, pone de presente que los políticos -de todos los niveles- todavía no son conscientes de que la época de las elecciones de estos cargos a cambio de puestos y contratos ya pasó.

Asesores jurídicos muy respetados en la región sostiene que el artículo 126 de la Constitución, modificado como se dijo por la llamada reforma al equilibrio de poderes, estableció que salvo los concursos regulados por la ley, la elección de servidores públicos atribuida a corporaciones públicas deberá estar precedida de una convocatoria pública reglada por la ley, en la que se fijen requisitos y procedimientos que garanticen los principios de publicidad, transparencia, participación ciudadana, equidad de género y criterios de mérito para su selección.

El Concejo de Ibagué publicó desde hace varias semanas las reglas que rigen la convocatoria para elegir Contralor, reguló el tipo de pruebas que se practicarían, la forma en que se valoraría y el carácter de las mismas pruebas.

Un primer obstáculo era la prueba de conocimientos con carácter eliminatorio que dejó por fuera de la carrera a más de 40 aspirantes. La hoja de vida, la experiencia, la prueba comportamental y la entrevista, completaban el concurso. Hasta ahí todo muy bien.

Pero transcurrido el 90 por ciento del proceso, el presidente de la corporación, Camilo Delgado, observó que la convocatoria estaba errada y pretendió eliminar cualquier elemento de mérito indicando que el cabildo tiene plena autonomía para nombrar al candidato de su preferencia.

La técnica de la modificación ha dejado enormes dudas en el proceso por cuanto la lógica más elemental impone que un concurso no puede cambiarse ad portas de su culminación, pero adicionalmente, porque en la alocada carrera para apropiarse del concurso se perdió de vista que varias disposiciones que siguen vigentes, entre otras de la propia Constitución, seguramente van a ser invocadas por la ganadora del concurso para reclamar judicialmente su nombramiento.

Delgado le dijo a EL OLFATO.COM que el Concejo acudió al criterio de interpretación jurídica más válido, que en este caso provendría del Consejo de Estado, máxima autoridad de lo contencioso administrativo.

Según Delgado, existiría un vacío jurídico y por lo mismo, muchas interpretaciones jurídicas sobre el caso, dado que para la convocatoria y elección de contralores no aplicaría la lista de elegibles como consideró la mesa directiva del cabildo el período pasado.

A la pregunta de si se estarían cambiando las reglas de juego, el presidente del cabildo argumentó que las reglas siguen siendo las mismas, que “incluso se culminó con las fases de la convocatoria”, y lo que se hizo fue precisar que no se podía hablar de una lista de elegibles que amarrara la decisión del concejo.

De ninguna manera se podría proceder con una convocatoria pública aplicando disposiciones del concurso de méritos, asumiendo que el mayor puntaje en el concurso de méritos debería ser elegido contralor municipal”, afirmó.

Delgado, quien se perfila como candidato a la Alcaldía de Ibagué, negó las versiones según las cuales, se estaría preparando el camino para dejar la Contraloría Municipal a Cambio Radical y el Partido Liberal.

Así las cosas, parece que al Concejo de Ibagué le gusta más la gasolina -o la ‘mermelada’- que los buenos competidores. Todo indica que se repetirá el oscuro proceso de las fotomultas del 2014 y este sábado, muy seguramente, se estrenarán los concejales cometiendo la primera irregularidad de este periodo.

Por: REDACCIÓN POLÍTICA

Foto: ELOLFATO.COM

Fecha: sábado - 9 enero - 2016