Por esta época electoral, los candidatos a la Cámara de Representantes y el Senado de la República buscan todo tipo estrategias para conseguir gruesas sumas de dinero para invertir en sus campañas.
Sin embargo, algunos políticos recurren a cuestionadas prácticas que incluso incomodan a sus fieles seguidores.
Un ejemplo de ello es lo que está pasando en la campaña del candidato al Senado de la República Carlos Edward Osorio y su fórmula a la Cámara de Representantes Harold Urrea.
Dos fuentes de esa organización política le dijeron a EL OLFATO que todas las personas a las que el congresista Osorio o el exdiputado Urrea les “ayudaron” a conseguir un contrato en una entidad del Estado deben comprar un bono de $500.000 para la rifa de un automóvil Chevrolet, modelo 2018, que será sorteado el domingo 18 de marzo, una semana después de las elecciones al Congreso de la República.
Los denunciantes sostienen que muchos de ellos se quedaron sin contrato el pasado 15 de diciembre y no cuentan con los recursos para comprar el costoso bono. Pero esa respuesta, al parecer, no la aceptaron en la campaña de Osorio y Urrea.
“A nosotros nos citan todos los lunes a la sede (ubicada en la carrera Quinta con calle 11). Allí nos entregan la publicidad y el bono; a cada persona le anotan la cédula y el número del bono que le correspondió. Así le llevan el control a todos los que recibimos la rifa”, dijo una de las integrantes de la campaña que pidió mantener su nombre en reserva.
La mujer admite que si el valor del bono hubiera sido más económico, lo habría comprado sin ninguna objeción .
“Todo el mundo pensaba que el bono del carro era más económico, que eran $20.000 o $50.000, uno dice: sí, y lo compra. Cuando pasamos a recibir la publicidad que teníamos que repartir, entonces nos dieron el bono, y el bono era por $500.000. Uno queda aterrado, porque $500.000 es siempre mucha plata”, agregó.
Cuando le preguntamos a otro de los militantes de la campaña de Osorio que si la adquisición de la rifa era voluntaria o eran obligados, su respuesta fue contundente.
“El problema es que quienes tuvimos contrato con él, que de pronto nos consiguió algún contrato pequeño el año pasado, pues de todas maneras estamos comprometidos a comprarlo. Es obligación comprar el bono porque tuvimos un contrato, un beneficio de ellos”, expresó la otra fuente.
Este grupo político controla varias secretarías de la Gobernación del Tolima y entidades nacionales como el Fondo Nacional del Ahorro (FNA).
Además, ambos contaron que tienen plazo hasta el 30 de enero para entregar por lo menos la mitad del valor del bono ($250.000), y que al interior de la organización hay serias dudas con la transparencia del proceso.
“Allá preguntaron: ¿por qué ese bono no juega con una lotería? Ellos dijeron que si se hacía con la lotería tocaba pagar impuestos. Otro interrogante es: ¿por qué juega después de las elecciones? Como nadie sabe cómo se escogerá el número, tal vez eso ya está amarado. El carro lo entregan donde Jorge Tulio (Rodríguez) en el CDA de Picaleña”, relató la informante.
Nos presionan hasta por no poner publicidad en el WhatsApp
Los dos integrantes de la campaña de Carlos Edward Osorio sostienen que muchos jóvenes profesionales que hacen parte de esa organización deben no solo conseguir votos, sino aportar recursos económicos para financiar los regalos que entrega “el doctor” y otros gastos como el pago de combustible y peajes para las reuniones que se hacen fuera de Ibagué.
“Nos presionan mucho. Hay que tener un número de posibles votantes y hasta nos regañan si no ponemos publicidad de la campaña en el WhatsApp personal”, anotó la fuente.
Periodista de EL OLFATO asistió a una de las reuniones
Para corroborar la información proporcionada por estas dos personas, EL OLFATO envió a esa sede política a una de nuestras reporteras, quien se hizo pasar como la nieta de una líder de esa organización.
En el lugar, una mujer que se identificó como Jennifer, le dijo a la reportera que sí era cierto la información sobre la venta de bonos. «Ven te cuento el tema de los bonos, si quieres dame un segundo y ya nos sentamos a hablar… No los tengo aquí a la mano pero ya me los traen. El bonito es un apoyo que nosotros le estamos haciendo al doctor Carlos Edward entre todos los amigos de él, todos los que trabajamos con él. El bono es que estamos sorteando un Chevrolet Ónix 2018, más que todo es un apoyo al doctor, tiene dos números y jugará el 18 de marzo, o sea cuando ya estemos celebrando el triunfo», aseguró Jennifer.
Después de contarle los detalles de la rifa, la coordinadora de la campaña le pidió el número telefónico a la periodista para enviarle un formato en el que debía registrar los nuevos «amigos» que quieren apoyar a Carlos Edward Osorio al Senado de la República, mensaje que llegó rápidamente al teléfono personal de la redactora política.
Responde la campaña
EL OLFATO buscó al candidato Osorio, pero se encuentra de gira por el departamento del Cauca. Quien sí habló con este medio de comunicación fue Haroldo Urrea, candidato a la Cámara de Representantes por el Tolima. Urrea reconoció la existencia del bono, pero aclaró que no están «obligando a nadie» a comprarla.
«Yo mismo se la estoy ofreciendo a todos los amigos, no es algo secreto, pero no es cierto que estemos obligando a la gente, eso es voluntario», aseguró.
Sobre la legalidad de esa rifa, el candidato afirmó: «Nosotros tenemos todo legal, porque consultamos al Consejo Nacional de Juegos de Suerte y Azar, y allá nos dijeron cómo la hiciéramos«.
Lo que no fue posible establecer es cómo sortearán el automóvil y si reportarán la totalidad de los recursos ante el Consejo Nacional Electoral.