Un nuevo aire se respira en el parque Macadamia, ubicado sobre la calle 64, entre el barrio Parrales y los apartamentos de Multicentro. Allí, la comunidad asegura que la percepción de seguridad ha mejorado y que gracias a ello pueden disfrutar de este parque, uno de los más bonitos de la ciudad.
Según relata Andrés González, uno de los moradores de la zona, las condiciones de seguridad del sector han mejorado gracias a la presencia de la Policía y al trabajo y cooperación de la misma comunidad.
“Durante mucho tiempo fue un sitio vetado para la comunidad. Siempre había temor de pasar por ahí porque siempre estaba lleno de personas consumiendo, de marihuaneros. Era algo terrible porque llegaban en pandillas, era algo intimidante, pero las cosas han cambiado”, señaló.
Según comenta, el decreto expedido por el gobierno del presidente Iván Duque, mediante el cual se aplican multas a quienes sean sorprendidos consumiendo ‘vicio’ en sitios públicos, ha contribuido a ahuyentar a los microtraficantes y drogadictos que tenían azotado este tranquilo sector.
La misma percepción tienen vigilantes de algunos establecimientos del sector, quienes aseguran que anteriormente “tenían que resguardarse porque el olor a marihuana era insoportable, además del temor que ocasionaba la posibilidad de que estas personas intentarán ingresar a los apartamentos”.
Aunque una visita en un día cualquiera deja en evidencia que este parque todavía es utilizado por algunos pocos jóvenes para el consumo de sustancias alucinógenas, al mismo tiempo puede apreciarse personas practicando deportes, paseando sus mascotas o dando un paseo en medio de los frondosos árboles.
“El parque ha cambiado en el sentido que ahora se ve más despejado, mantiene más solo, ya no se ve tanta gente debido a esa reglamentación. Pero sí hace falta sembrar más árboles, para que la gente venga y lo disfrute más, además de que los juegos para los niños están dañados. También hace falta un parque biosaludable para las personas adultas”, afirmó Daniela Rodríguez, una transeúnte que disfrutaba del parque.
De esta forma la comunidad ha logrado apropiarse de este parque, el cual ha sido reclamado para la práctica del deporte y disfrutar del tiempo libre, arrebatándoselo al microtráfico y el consumo de drogas.