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Todo un misterio envuelve la partida del director de Contratación de la Alcaldía de Ibagué, Jaime Daniel Salazar, quien dejó el cargo al finalizar el mes de julio y desde ese momento su nombre se volvió casi impronunciable en la sede de gobierno.
Hay dos versiones sobre su ausencia. La primera, es que tomó su periodo de vacaciones y después solicitó una licencia no remunerada para estudiar en el exterior. La segunda, es que salió del país pero para evadir los serios problemas legales y disciplinarios que se vienen para la mayoría de funcionarios de la administración de Luis H. Rodríguez.
Del caso de Jaime Daniel Salazar nadie quiere hablar en la Alcaldía de Ibagué. Buscamos en tres oportunidades a la secretaria de Apoyo a la Gestión, Elsa Victoria Riaño, para indagar por el exfuncionario pero no fue posible hablar con ella. La persona que contestó su celular siempre dijo: “No puede atenderlo. Se encuentra en un comité” y tampoco devolvió las llamadas.
Fuentes de la administración aseguraron que la decisión de la funcionaria es no atender ninguna entrevista que tenga que ver con el exdirector de Contratación y que siempre se iba a negar al teléfono. Ni en su oficina fue posible localizarla.
Este portal contactó al mismo Jaime Daniel a través de su cuenta de Facebook, pero antes de hacérsele cualquier pregunta, bloqueó el perfil desde el cual lo contactamos.
Estaría en Australia
Personas cercanas al abogado aseguran que salió de Ibagué con destino a Buenos Aires, Argentina. Allí pasó una corta temporada y después habría hecho conexión con Melbourne, Australia, su destino final.
“Él se fue y le dijeron que no viniera pronto porque esto se iba a complicar”, le contó a ELOLFATO.COM una fuente de alta credibilidad de la Alcaldía de Ibagué.
Jaime Daniel Salazar fue uno de los funcionarios de confianza del saliente alcalde Luis H. Rodríguez y por sus manos pasó casi toda la contratación de esta cuestionada administración, razón por la cual enfrenta decenas de procesos en la Procuraduría, la Personería y la misma Fiscalía General de la Nación. (Ver: Habrían manipulado licitación para favorecer a contratista en la Alcaldía de Ibagué)
Uno de los procesos que hay en su contra en la Procuraduría General de la Nación, y que está va avanzado, es por la presunta creación de un carrusel de contratos para favorecer empresas de vigilancia privada. El caso lo lleva la procuraduría delegada para la moralidad pública y está en etapa probatoria. (Ver proceso)
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Él fue uno de los funcionarios llamados a rendir versión libre por parte de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía, dentro de la investigación que adelanta por los polémicos estudios y diseños de los escenarios de los Juegos Deportivos Nacionales. (Ver: Unidad Anticorrupción de la Fiscalía llegó a Ibagué tras la pista de los contratos de los Juegos Deportivos Nacionales)
El testimonio de Salazar es fundamental. La Fiscalía quiere saber por qué no participó en nada de los Juegos Deportivos Nacionales y por qué le pidió al alcalde Luis H. Rodríguez que lo mantuviera al margen de todo el proceso contractual, como si presintiera que todo iba a salir mal. (Ver: ¡Fracaso consumado! Escenarios de los Juegos Nacionales se entregarán haste el 30 de mayo de 2016)
Un integrante del gabinete sostiene que esa petición la hizo Jaime Daniel por escrito y que eso no le habría gustado a su jefe. La misma postura la asumieron por lo menos tres secretarios del despacho, quienes prefirieron evitar cualquier contacto con el abogado Orlando Arciniegas Lagos, el hombre fuerte del IMDRI y responsable de las licitaciones que se ganaron los ‘poderosos’ consorcios colombo-españoles, que finalmente incumplieron con las obras. (Ver: Dineros de los Juegos Nacionales no pueden terminar en bolsillos de particulares: Vicefiscal)
Sus amigos también ignoran su paradero
Jaime Daniel Salazar tiene 35 años de edad, es soltero y vivía con sus padres en una casa ubicada el sector de Mirolindo. Es un hombre amable y bohemio, y goza del cariño de muchas personas en la ciudad.
Este portal consultó a cuatro amigos suyos y a todos los tomó por sorpresa la noticia. Ninguno cree que se haya ido del país por los problemas disciplinarios y penales que se avecinan, pero sí les causa curiosidad es el hermetismo que hay frente a su partida.
En su cuenta de Facebook no hay rastro de sus viajes, no ha compartido fotos de su nueva vida y ni ha hecho comentarios, sólo comparte noticias de medios internacionales.
