La presente generación de jovenes colombianos tiene en sus manos la posibilidad de terminar el conflcito armado colombiano. Esta generación, votando Sí el próximo dos de octubre, pondrá punto final a un capítulo de horror escrito durante más de cincuenta años.
A esta generación se le conocerá como la Generación del Sí. Es la primera generación de jóvenes que podrán vivir un país sin conflicto armado interno cuando se reafirme el Acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera. Será la generación que lidere la nueva Colombia.
La generación del Sí anhela la Paz y aspira a vivir en una sociedad con cambios estructurales que conlleven al progreso social, en donde los recursos del Estado provenientes de los impuestos ya no se gasten en la guerra, en armas y balas, sino que se inviertan en nuevas oportunidades para los niños y niñas.
La generación del Sí no está anclada al pasado, en sus corazones no hay odio, ni envidia, mucho menos soberbia, es la generación que está dispuesta a cambiar la historia de Colombia, a evitar que hayan más víctimas por causa del conflicto. En donde cese el fuego y las hostilidades bilaterales sea definitivo y las Farc dejen las Armas.
La Generación del Sí sueña que sus hijos no vivan los horrores de la guerra que vivieron sus padres, que los fenómenos de corrupción sean cosas del pasado, que la democracia sea el camino para resolver las diferencias políticas.
Anhelan vivir en un país en donde los hijos entierren a sus padres, sin viudas, ni huérfanos por causa de la guerra, en donde haya verdad, justicia, reparación y no repetición, luchando contra la impunidad combinando mecanismos judiciales que permiten la investigación y sanción de las graves violaciones a los derechos humanos y las graves infracciones al Derecho Internacional Humanitario.
La Generación del Sí está dispuesta a viajar a los municipios para aportar su grano de arena en la construcción del edificio del desarrollo rural integral dejando las comodidades que le ofrece la ciudad y su entorno social. Ejemplo de esto es «Paz y Región» en el Tolima o «Manos a la Paz» en Colombia. Es la generación que apoya al campo para que este no sea sometido al miedo y la violencia.
La Generación del Sí contribuirá a la transformación estructural del campo, cerrando las brechas entre el campo y la ciudad y creando condiciones de bienestar y buen vivir para la población rural, sin pobreza, en igualdad y con pleno disfrute de los derechos de la ciudadanía.
La Generación del Sí le apuesta a la Apertura democrática para construir la paz, en donde surjan nuevas fuerzas en el escenario político para enriquecer el debate y la deliberación alrededor de los grandes problemas nacionales y, de esa manera, fortalecer el pluralismo y por tanto la representación de las diferentes visiones e intereses de la sociedad, con las debidas garantías para la participación y la inclusión política.
La Generación del Sí será la que el próximo dos de octubre iniciará un nuevo capitulo en la historia de Colombia.