Poco a poco se van conociendo más detalles acerca de la grave crisis financiera que afronta la Universidad del Tolima. Esta vez, la Contraloría Departamental del Tolima realizó una auditoria de las vigencias fiscales correspondientes al primer periodo de José Herman Muñoz en la rectoría y encontró que, durante los últimos tres años, la UT destinó $6.379’768.686 para el pago de viáticos.
Según la Contraloría, la Universidad del Tolima destinó, entre el 2013 y el 2015, los millonarios recursos fueron destinados a estudiantes, docentes, administrativos y personal ajeno a la universidad, todo ello con el fin de atender situaciones de carácter académico, deportivo y/o culturales.
«Los ‘apoyos económicos’, según la práctica universitaria, se han creado con el fin de cubrir gastos relacionados con la participación en eventos académicos, científicos, artísticos, culturales y deportivos. Sin embargo, el manejo indiscriminado dado a este concepto de gasto ha permitido que se asuman gastos que en la práctica no corresponden a la finalidad para el cual han sido concebidos«, señala el informe.
De acuerdo con la Contraloría, durante la auditoría se pudo establecer que la suma total de los hallazgos fiscales corresponden a las vigencias 2013, 2014 y 2015, donde se establecieron 79 observaciones administrativas, 68 procesos disciplinarios, 14 procesos penales y otros 22 procesos fiscales, todos ellos por $3.151’611.321.. (Ver: La denuncia en contra del rector de la UT que interpusieron cuatro integrantes del Consejo Superior)
Así pues, entre los hallazgos de la Contraloría se encuentra que la Política Laboral Integral, implementada desde el 2012 en la Universidad del Tolima, contribuyó en gran medida al déficit financiero, dado que, como es bien conocido, se pasó de una planta de personal de 295 a 639 cargos. (Ver: La defensa del rector de la UT en La W Radio)
“(…) con sus implicaciones de carácter prestacional que tiene el aumento tanto de cargos como de salarios, el estudio de viabilidad financiera llevado a cabo para implementar dicha política no fue el más adecuado, teniendo en cuenta que se basó en el comportamiento histórico de los recursos del balance, recursos estos que son inciertos, los cuales resultan al cierre de cada periodo presupuestal, al comparar las obligaciones pendientes de pago con la disponibilidad de efectivo, cuya diferencia que se considera libre de compromiso se debe adicionar al presupuesto de la siguiente vigencia”.
Y continúa: “La Universidad del Tolima viene reconociendo y cancelando sin tener soporte jurídico, unos apoyos económicos y viáticos a los representantes estudiantiles ante los diferentes estamentos universitarios; se pudo evidenciar que por este concepto la Universidad del Tolima canceló irregularmente durante los años 2012, 2013, 2014 y 2015 la suma de $150 millones aproximadamente”, dice el informe. (Ver: MinEducación dice que José Herman Muñoz perdió la gobernabilidad de la UT)
Además de ello, la Contraloría también advierte que los convenios interadministrativos firmados entre la UT y entidades como la Gobernación del Tolima, la Alcaldía de Ibagué y Cortolima, no se encuentran contemplados dentro del Plan de Desarrollo de la alma mater, motivo por el cual dichos convenios no se han ejecutado de una manera adecuada y le han generado pérdidas económicas a la alma mater. (Ver: Por negligencia administrativa, Universidad del Tolima pierde $13.600 millones)
“La Universidad del Tolima carece de proyectos debidamente elaborados conforme a la metodología y las normas técnicas que los regulan para su posterior registro y conservación, al igual que la creación de las correspondientes fichas técnicas que permitan su consulta y estudio para el debido funcionamiento formal del Banco de Programas y Proyectos de Inversión”, dice el informe. (Ver: Rector del UT deja el cargo a disposición, pero la carta no dice la palabra “renuncia”)
Mientras tanto, la comunidad universitaria continúa a la exceptiva con respecto a la renuncia a medias del rector de la UT, José Herman Muñoz, quien al parecer se está aferrando con las uñas a su cargo. (Ver: Rector de la UT denuncia “acoso laboral” ante el Ministerio del Trabajo)