El alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, criticó duramente la falta de resultados de los órganos de control en la ciudad, durante los cuatro años de la administración de su antecesor Luis H. Rodríguez, y le pareció insólito que la Contraloría Municipal esté mostrando grandes resultados, justo cuando el contralor Edwin Riaño está por terminar su periodo.
La Contraloría de Ibagué, que en los primeros 15 días de enero, emitió dos comunicados de prensa en los que informó sobre el hallazgo presuntos detrimentos fiscales en el IBAL y la Gestora Urbana por 11.535 millones de pesos. En la primera entidad por el desperdicio de agua (5.535 millones) y en la segunda por la ‘desaparición’ de la deuda de los arrendamientos de los bienes fiscales (6.000 millones).
“Cómo así que después de cuatro años ahora sí encuentran algo. O será que quieren mostrar algo cuando ya se van”, se preguntó Jaramillo.
El mandatario local aseguró que los ibaguereños pasaron cuatro años esperando resultados, pero nunca llegaron. Recordó que durante la pasada administración se celebraron contratos cuestionados y la ciudad presenció el peor escándalo administrativo de la historia, los Juegos Deportivos Nacionales, y no hay ni una sanción.
Dijo que, ante la falta de resultados de la Contraloría, la Personería y la Procuraduría, espera acciones de la Fiscalía General de la Nación.
“Yo aspiro que la Fiscalía, a la que le solicité que interviniera, y el señor Fiscal (Eduardo Montealegre) que está muy interesado porque es ibaguereño, nos pueda dilucidar a ver qué pasó con los temas de los escenarios y los contratos de los Juegos Nacionales, porque la gente está esperando eso”, afirmó el alcalde.
La nueva administración ha recopilado toda la información existente sobre los contratos de los Juegos Deportivos Nacionales y ya fue aportada a la Fiscalía General de la Nación, pero en Bogotá, porque no habría confianza en la gestión de esta institución en Ibagué.