Los municipios y veredas del norte del Tolima que consumen agua proveniente de los ríos Recio, Azufrado, Gualí y Lagunilla están en riesgo porque estos afluentes tienen con una alta concentración de Hierro y sedimentación por la actividad del Nevado del Ruiz, alertó el director de Cortolima, Jorge Enrique Cardoso.
Los análisis hechos por Cortolima y Corcuencas muestran que las fuentes hídricas que nacen en el Nevado del Ruiz, desde el pasado miércoles 14 de enero, se están presentando cambios significativos en las características naturales del agua y no es apta para el consumo humano, según los estándares definidos por el Ministerio de Salud.
La situación más compleja se ha evidenciado en el río Recio del que se abastece el acueducto de Lérida, una población de 19 mil habitantes aproximadamente.
“Es pertinente que por intermedio del Comité de Gestión del Riesgo y de la Secretaria de Salud Departamental, se adopten medidas preventivas y si a ello hubiere lugar medidas coercitivas tendientes a evitar riesgos mayores en las comunidades y usuarios de las fuentes hídricas de los ríos Recio, Lagunilla, Azufrado y Gualí”, expresó Cardoso.
Ante esta situación, la secretaría de Salud del Tolima será la que determine si se suspende el suministro de agua y define un mecanismo sustituto de abastecimiento de agua a las poblaciones afectadas.