Los empleados de la Clínica Tolima trabajan con zozobra. Casi todas las noches deben reforzar la seguridad debido a la agresividad de los acompañantes de los pacientes, ante las demoras en la atención.
Al día de hoy, ya son varios los funcionarios de la Clínica Tolima que han padecido agresiones de usuarios desesperados por el colapso del sistema de salud. Pese a que las clínicas y hospitales intentan dar prioridad a niños y adultos mayores, el personal médico y administrativo no es suficiente para atender a toda la población.
Debido a la crisis del Hospital Federico Lleras y la Clínica Saludcoop, así como el cierre de la Clínica Minerva, la Clínica Tolima ha tenido que atender a un mayor número de pacientes. Ello ha ocasionado que el centro médico se congestione y los pacientes adopten actitudes agresivas.
Las agresiones de algunos usuarios son continuas. Debido a esto, la Clínica Tolima ha tenido que pedir presencia policial para evitar que se presenten agresiones al personal médico y administrativo.
Sin embargo, esta situación no solo se presenta en Ibagué, sino en todas las clínicas y hospitales del país. Por tal motivo, la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas realizó entre sus afiliados la primera «Encuesta de agresiones en el servicio de urgencias de los hospitales y clínicas», encontrando que de cada 100 empleados, 15 son objeto de algún tipo de agresión verbal, física o sexual.
La encuesta determina que el 98.7 % de los encuestados ha sido víctima de violencia verbal, el 27 % de violencia física y el 1.6 % de violencia sexual, en el primer caso el 55.2 % de las agresiones se dieron sin arma, el 28.2 % con daños al mobiliario de la institución y el 8.3 % de los casos con un arma y objeto contundente.
Los más afectados
El estudio reveló que el personal asistencial es el que recibe el mayor número de agresiones con el 77 % de los casos, mientras que el 23 % corresponde a violencia contra el personal administrativo.
Del mismo modo, se determinó que dentro del grupo del personal asistencial quienes reciben el mayor porcentaje de agresiones, con un 40.8 %, son las auxiliares de enfermería, seguido de los médicos generales con 25.6 %; las enfermeras con un 16.2 % y los médicos especialistas con un 6.1 % del total de los casos.
El porqué de las agresiones
Según la encuesta de la ACHC, son varias las causas por las cuales los pacientes terminan agrediendo a médicos, enfermeras y personal administrativo. Entre las más comunes, el estudio señala:
- El tiempo que debe esperar el paciente para ser atendido con un 62.1 %;
- el desacuerdo con la clasificación de ‘Triage’, 34.3 %;
- limitar el número de acompañantes del pacientes, 30.3 %;
- solicitudes injustificadas de incapacidades, medicamentos, exámenes y otros con 15,7 %;
- problemas con la información del estado de salud del paciente, 15,1 %;
- desacuerdo en el monto a pagar, 13, 3 %.
Sistema colapsado
Juan Carlos Giraldo, director general de la ACHC, aseguró que “es necesario que tanto los actores del sector como las administradoras de riesgos laborales actúen al respecto. La utilidad de este estudio radica en hacer un diagnóstico, pues no podemos seguir pidiendo intervenciones basados en anécdotas y hoy entendemos que este problema de agresiones al personal sanitario es serio, por eso necesitamos acciones preventivas, de educación y de protección para todo el personal”.
Asimismo, Giraldo dijo que el principal problema es el propio sistema de salud, ya que este está funcionando principalmente a través del servicio de urgencias en todo el país. Esto genera congestión en las clínicas y hospitales, así como las demoras en la atención médica y la baja calidad del servicio.
«La solución tiene que venir con una reforma profunda al sistema, con un cambio en la atención, el sistema de salud debe ser más preventivo que asistencial”, concluyó Giraldo.