Hospital Federico Lleras Acosta salió de la crisis

Después de casi cuatro años de malas noticias, el centro asistencial más importante del Tolima tiene una cara distinta. Todos los servicios están abiertos, la ocupación alcanzó el 90 %, su facturación mensual es de $11.000 millones y sus gastos son de $8.500 millones, asegura la Supersalud.

El jueves 4 de septiembre de 2014 los tolimenses amanecieron con una pésima noticia. El Hospital Federico Lleras Acosta, el más importante de la región, fue intervenido por la Superintendencia Nacional de Salud, debido a una profunda crisis económica y administrativa provocada por los malos manejos de la clase política -liberales y conservadores- que ha administrado el Departamento en la última década.

El panorama era oscuro. Las deudas con los trabajadores y los proveedores crecían rápidamente, la facturación de servicios era limitada, la cartera se incrementaba mes a mes porque no había una eficiente gestión de cobro ante las EPS y durante los años 2011, 2012 y 2013 hubo un déficit presupuestal de 38%, 45% y 37%, respectivamente, lo que puso en riesgo el equilibrio financiero.

Hoy, 3 años, 4 meses y 17 días después de la intervención, el Hospital Federico Lleras Acosta tiene otra realidad. “Estamos al día con los trabajadores. El pasado mes de diciembre se les pagó todo, incluidas sus primas, algo que era más o menos exótico, y los proveedores ahora nos hacen descuento por pronto pago”, sostiene Inés Bernarda Loaiza, gerente interventora de este centro asistencial.

Cuenta que el cierre del año 2018 fue importante para el Hospital por un giro de recursos que hizo el Gobierno Nacional por $15.400 millones, dinero que permitió ponerse al día con los trabajadores y los proveedores.

“Hoy tenemos todos los servicios abiertos y una ocupación (de pacientes) del 90 %. Incluso, hemos podido enfrentar el incremento en la demanda de servicios tras el cierre de la clínica Esimed y la unidad de urgencias de la clínica Medicadiz, con algunas dificultades por el volumen de pacientes”, afirma.

Según la interventora, la facturación o venta de servicios mensualmente alcanzó -en promedio- los $11.000 millones, mientras que sus gastos fueron de $8.500 millones, lo cual garantiza una operación sin contratiempo.

“Si nos pagaran todo lo que facturamos en el mismo mes, incluso estaríamos con una posibilidad de ahorro; en el sistema de salud esto no ocurre. A nosotros nos están girando entre el 70 % y el 80 % de lo que facturamos (cada mes). Al haber quedado al día con las deudas anteriores, que era una carga muy grande que traíamos con proveedores, de $15.900 millones, ya empezamos a pagar lo corriente, y empieza el flujo normal de los recursos”, resalta Loaiza.

Deudas de las EPS, el problema pendiente

Pese a los evidentes síntomas de recuperación, al Hospital Federico Lleras lo sigue impactando de manera negativa la crisis general del sistema de salud provocado por la falta de pago oportuno de las EPS. (Ver: cuadro)

“No se puede desconocer que hay una cartera muy alta. En este momento nos deben $140.000 millones, es una cartera de más de 360 días, pero lo significativo es que tenemos deudas entre $36.000 y $40.000 millones. Sí tenemos un problema de cartera, pero si recuperamos por lo menos la mitad de esa cartera lograríamos pagar las deudas y le quedaría dinero al Hospital”, subraya la interventora.

De los $140.000 millones hay serias dificultades para recuperar unos $45.000 millones que deben las desaparecidas Cafesalud (24.000) y Salud Vida (21.000), estas dos últimas no han manifestado su interés de cancelar los servicios que se le prestó a sus usuarios.

“La situación más difícil la tenemos con Cafesalud que le quedó debiendo al Hospital $24.000 millones, y está en una situación que todavía no logramos saber cómo se va a acceder a ese pago. Y el otro es Salud Vida, que nos debe $21.000 millones. Por ser privadas si se declaran en quiebra no responderían y sería otro pasivo del sistema que asumiría el Hospital”, explica.

Se necesitan $42.000 millones para modernizarlo

La gerente interventora afirma que el Hospital Federico Lleras requiere una inversión de por lo menos $42.000 millones para la adquisición de equipos que posibiliten la prestación de servicios de alta complejidad en áreas como cáncer y cardiología.

“Los equipos más inmediatos que necesitamos, para cáncer y enfermedades cardiovasculares, cuestan $26.000 millones. El Hospital tiene un potencial muy grande”, dice.

Por eso, agrega, que la mejor alternativa para obtener recursos frescos y poder invertir en tecnología es la venta de la sede de El Limonar.

“Con esos recursos nos convertiríamos en el mejor Hospital de toda la región. Eso significaría ponerlo al día en infraestructura, mejorar las condiciones de hotelería. A pesar de que lo hemos mantenido limpio y organizado y se ve en buenas condiciones, hace falta mejorar los espacios”, advierte.

El concurso de méritos que causó malestar entre los trabajadores del H. Federico Lleras Acosta

¿Hubo despido masivo, como lo denuncian los sindicalistas?

Durante la última semana surgieron algunas críticas de las organizaciones sindicales por el despido masivo de unos 98 empleados, situación que fue aclarada por la interventora.

¿Es cierto que hubo una ‘masacre laboral’ como se denunció?

No. Aquí lo que hubo fue un concurso de méritos en todos los hospitales públicos de Colombia, proceso que organizó y ejecutó la Comisión Nacional del Servicio Civil. Nosotros teníamos para ofertar 243 puestos que estaban en provisionalidad o vacantes. De esa cifra, 166 personas aprobaron el concurso, de ellos 122 venían trabajando en el Hospital y los 44 restantes eran personas que se presentaron y aprobaron las pruebas.

Y los 77 cargos (de los 243) que no pudieron ser asignados, se declararon desiertos, porque no se presentaron aspirantes o ninguno aprobó el concurso, pues seguirán siendo ocupados por las personas que estaban en provisionalidad, hasta que haya un nuevo concurso. Ellos, por decirlo de alguna manera, se ganaron la lotería sin comprarla.

¿Qué pasó con las 98 personas que, según los sindicatos, fueron despedidas?

Estas personas venían trabajando en cargos de provisionalidad. Lo que sabemos es que muchos de ellos decidieron no presentarse al concurso de méritos, por voluntad propia, argumentando que esos puestos no podían ser ofertados. Otros se presentaron, pero no pasaron. Entendemos la molestia de cada uno de los empleados que ya no estarán en el Hospital, pero este fue un concurso de méritos, en todo el país, en el que se ofertaron casi 5.000 cargos en Colombia.

Y también hubo casos de empleados que estaban en planta temporal, se presentaron, aprobaron el concurso, y entraron a la planta definitiva, quedaron en carrera administrativa en unas mejores condiciones de trabajo, en términos de mayor estabilidad.

Le cambio de tema… ¿por qué la Gobernación del Tolima dice que no recibe el Hospital porque aún está en crisis?

No lo sabemos. Ellos conocen las cifras y todos los indicadores. Lo cierto es que la prórroga de la intervención va hasta el 2 de junio de este año.

Por: LUIS EDUARDO GONZÁLEZ

Foto: EL OLFATO

Fecha: lunes - 21 enero - 2019