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El gobernador del Tolima, Óscar Barreto Quiroga, sigue dando muestras de solidaridad con los políticos y exfuncionarios que caen en desgracia.
Primero lo fue con el exalcalde de Villahermosa Carlos Evelio Herrera, quien pese a sus investigaciones por presuntos actos de corrupción, hizo parte de su gobierno a través de un contrato de prestación de servicios. (Ver: Por corrupción se habrían perdido $1.300 millones en Villahermosa)
Después se solidarizó con la familia del exsecretario de Hacienda de Ibagué Oswaldo Mestre, capturado por el desfalco de los Juegos Deportivos Nacionales, y les mantuvo la cuota burocrática en la Gobernación del Tolima a través de su hermana Claudia Mestre, quien se desempeña como secretaria de Desarrollo Económico. (Ver: Barreto se solidarizó con la familia Mestre y les mantiene la cuota en la Gobernación)
Y ahora, el mandatario hizo público su nuevo acto de generosidad. Nombró como nuevo director de la oficina de Gestión del Riesgo del Tolima a Jorge Alexander Mejía Castellanos, quien fue derrotado el pasado domingo en las elecciones a la Alcaldía de Fresno. (Ver: El primer ‘round’ que le gana el uribismo al barretismo)
Mejía perdió por apenas 71 votos frente a su contendor Carlos Cárdenas, candidato del Centro Democrático en coalición con los partidos Liberal, Opción Ciudadana y La U, del sector del representante Carlos Edward Osorio.
El nuevo director de la Oficina de Gestión del Riesgo, Jorge Alexander Mejía, reemplaza en el cargo al Giovanni Posada, quien venía de la administración del exalcalde Luis H. Rodríguez en donde ocupó la Dirección Operativa de la Secretaría de Tránsito.
¿Sí era el candidato del Gobernador?
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El nombramiento de Mejía pone en evidencia su cercanía con el gobernador Óscar Barreto, quien lo posesionó en el cargo 72 horas después de su revés electoral en el Fresno.
Durante toda la campaña, y después de conocerse los resultados, se dijo que este político del partido Conservador tuvo el respaldo de la Gobernación del Tolima.
Milton Restrepo, diputado del Centro Democrático, afirmó que en el Fresno «ganó la honestidad, la transparencia que no cedió ante los chantajes, las presiones y los sectarismos del Gobernador del Tolima».
