Un contrato para proveer 100 docentes para la zona rural de Ibagué, por 2.300 millones de pesos, que suscribió la pasada administración el 29 de diciembre de 2015 con la fundación Fundes de El Espinal, no se ejecutará.
Así lo decidió el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo, quien dijo que no solo buscará tumbar el proceso sino que interpondrá una queja disciplinaria en contra del exsecretario de Educación, Diego Guzmán, y dos de sus asesores, por haber suscrito dicho contrato sin el cumplimiento de los requisitos legales.
Según Jaramillo, “hasta ayer nos dimos cuenta que hicieron un proceso totalmente irregular, que vamos a llevar a la Procuraduría (…), un proceso totalmente irregular, una contratación de 2.300 millones de pesos con Fundes sin CDP (Certificado de Disponibilidad Presupuestal), sin llenar todos los requisitos, y por eso era el afán del anterior secretario de tratar de venderle a esta administración algo que dijimos que no íbamos a hacer”.
El mandatario, desde la campaña, se comprometió a no continuar la política de los exalcaldes Jesús María Botero y Luis H. Rodríguez de entregar millonarios contratos a fundaciones como Funimedes, que pertenece al exgerente del Banco Pupular Héctor Marín. Esta vez, querían mantener el modelo pero con la fundación Fundes de El Espinal, a lo que se opuso Jaramillo.
Los docentes los contratará la Alcaldía de Ibagué
Ante la decisión de no aceptar el nuevo contrato de tercerización de docentes, el alcalde anunció que la ministra de Educación, Ginna Parody, otorgó 95 plazas docentes para atender la zona rural que era cubierta a través de los millonarios contratos con las fundaciones.
“Uno no se puede explicar que hayan pasado tantas administraciones y no se haga hecho una cosa como esta”, resaltó Jaramillo.
Finalmente, pidió a los padres de familia tener paciencia mientras la secretaría de Educación de Ibagué adelanta el proceso de selección de los 95 nuevos docentes,