Pedro Serrano abrió Estancómodos Bar con la lejana intención de que se convirtiera en uno de los mejores rumbeaderos de la ciudad. Su intención, inicialmente, era distribuir licores, con el tiempo se consolidó en lugar que es hoy.
Hace diez años, pensó que replicar el negocio familiar al que se habían dedicado sus padres por años, le podría generar ingresos. Entonces empezó con una licorera ubicada en la zona rosa de la época, 39 con Quinta.
Su padre tenía una cigarrería llamada Los Andes y, su mamá tenía otra, la Viña. Toda la vida se dedicaron a esa actividad comercial, por lo que él decidió incursionar con su “estanco” como le llaman coloquialmente a las distribuidoras de licor. De ahí nació La viña de los Andes, que hoy todos conocen como Estancómodos Bar.
“Yo me había quedado sin trabajo y necesitaba hacer algo, se me ocurrió montar la licorera cerca, donde estaban todos los bares y, convertirme en un opción para que ellos surtieran su negocio”, dijo.
Silla por silla y se volvió un bar
Sin embargo, “sorpresivamente me convertí en una opción para la gente, para los otros compradores, querían siempre quedarse ahí a tomar, me tocó empezar a comprar bancas para que se sentaran”, explicó Serrano.
No pasó más de un mes cuando La Viña de los Andes dejó de ser licorera para convertirse en uno de los bares de la zona. La gente lo pedía. No veían el lugar como un distribuidor de licor, sino como un sitio para tomarse unos tragos y charlar.
Entonces Pedro tomó la decisión y, poco a poco, empezó a construir su bar, compró mesas, sillas, luces, sonido, todo lo que implicaba tener un lugar como este para entregar un buen servicio a sus clientes.
Así, de grano en grano empezó Estancómodos y después de siete años ubicados en la misma zona y con un espacio reducido, decidieron reinventarse y regalarle a su gente una nueva opción.
En noviembre de 2012, Estancómodos Bar pasó de ser un sitio donde podían rumbear máximo 80 personas en una noche, a un lugar donde pueden entrar máximo mil personas.
La nueva era
Creó una sociedad para poder mantener su negocio, ahora este lugar es de 4 personas que trabajan arduamente para continuar con el mismo nivel de acogida que ha ganado.
Mirar hacia atrás y pensar en el 14 de mayo de 2005, hace que este hombre tenga la convicción de que en Ibagué, sí se pueden crear lugares diferentes, se le puede apostar a la independencia económica y ser generador de empleo.
Según Serrano, el punto a favor de este lugar ha sido su buen servicio, “nuestra idea es que cada fin de semana estemos todos los propietarios, queremos que la gente se sienta cercana, que sientan que el bar es de ellos, que se sientan como en casa”.
Los socios de Estancómodos ven el éxito del bar en el servicio que le entregan a sus clientes, la manera de atenderlos y hacerlos sentir, como su mismo nombre lo dice, cómodos.
Tienen como propósito que cada fin de semana estén los propietarios del lugar para entregarle cercanía a las personas y, de igual manera, tiene como prioridad mantener su estilo crossover en la música, por lo que manejan tandas de diferentes géneros en la medida exacta para no saturar a sus asistentes.
“Estos diez años son resultado de un esfuerzo gigante, de mucha de dedicación y empeño por parte de todas las personas que me han acompañado y de los socios que ahora me acompañan, estos diez años han sido de grandeza”, asegura Serrano.
No sólo rumba, también comida
Estancómodos creció a tal nivel que hoy ofrece otro ambiente de rumba. En Julio de 2014 nació El Estanquito, un lugar para la gente que disfruta de la música de plancha, la popular, el vallenato, la salsa, el merengue las baladas y para los que son más arriesgados, el karaoke.
Cinco meses después apareció Estancómodos la Parrilla, el lugar que completó la lista de servicios que presta el bar. Ahora la gente puede encontrar allí desde empanadas hasta diferentes cortes de carne durante la rumba. Sin duda, este bar creció para entregarles a los ibaguereños una propuesta diferente.
“Estamos felices en nuestros primeros diez años y espero que la gente nos acompañe en este gran logro”, enfatiza Serrano.
Por eso, celebrarán este sábado 16 de mayo, con una fiesta en la que estarán los K Morales, hermanos del artista fallecido Kaleth Morales. Para ese día el bar estará dividido en palcos, mesas gold, mesas platino y VIP, si usted ha hecho parte de ese gran número de ibaguereños que han seguido al bar por tantos años y quiere acompañarlos en este gran evento podrá conseguir sus boletas en los números 3107645614 y 3103450996.
“No nos queda más que agradecer a la gente por estar siempre cerca, por seguirnos en cada paso, porque ellos han hecho que esto sea tan grande como lo es hoy para nosotros, por eso queremos que nos acompañen en nuestra fiesta y hagan de estos diez años una rumba diferente, como todas”, finalizó Serrano.