Escenarios, las cuentas no cuadran

Por: FERNANDO VARÓN PALOMINO

Cuando se creía que los anuncios del alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, de construir los escenarios deportivos, que los corruptos de todos los pelambres unidos en hacer causa común nos  “robaron”,  todo señala que la feria de las vanidades ha impedido unirnos para sacarlos adelante y que no sea un motivo de campaña política como ya se ventila, liderada por el alcalde petrista, que en su rendición de cuentas sacó lo mejor de su repertorio para atacar, desprestigiar, encarar y anunciarse como el mesías de la izquierda en Ibagué y que todo lo que ha hecho es histórico, incluidas sus “primeras piedras” en escenarios ya inaugurados como las piscinas de la 42. Eventos a los cuales siempre van los mismos cinco dirigentes, los mismos deportistas, los contratistas bogotanos, los constructores de Cali y el mismo periodista, en un panorama desalentador.

Según certificación dada por la gerente del IMDRI, con fecha enero 8 de 2019 a este columnista, se señala que el Estadio alterno de futbol del parque deportivo, estadio de atletismo, el patinódromo, la construcción y adecuación del complejo de piscinas de la Unidad Deportiva de la calle 42, cuyos contratos están adjudicados y en ejecución, así como el Coliseo  Mayor ( $ 39.909.984.215), la terminación y adecuación de los parqueaderos y construcción del Coliseo Multideportes y obras de urbanismo de la Unidad Deportiva de la calle 42 por un valor de $22.139.882.267 y la construcción del urbanismo y paisajismo en el Parque Deportivo, por valor de $18.852.775.747, estos últimos en proceso de licitación, se encuentran FINANCIADOS,  es decir, con cierre financiero, lo cual indica que están dispuestos los recursos, por lo que  se ha contado con la disponibilidad presupuestal sustentada en la disponibilidad de recursos, podría pensarse. 

Adicionalmente, de manera inconsulta con los demás cooperantes que suscribieron los convenios, el IMDRI, dispuso cambiar escenarios inicialmente acordados por otros, caso cancha de Softbol, lo que significa, que el municipio asume en su integridad este costo.

No obstante la anterior certificación oficial permite concluir que las cuentas no cuadran, en primer lugar, por la cacareada devolución de 25 millardos que desde hace más de año y medio públicamente se le dijo al alcalde que era mejor devolverlos en esa oportunidad para que el gobierno Santos se los retribuyera al municipio como compromiso de “ Los mejores Juegos de la Historia”, sin embargo como buen petrista cree que la ley es para los que solo escriben con una mano y no es propiamente la izquierda, y así, a regañadientes le toca devolverlos y que se le retribuirán? Quien sabe cuándo porque no creo que se los entreguen en año electoral para seguir alimentando a su Toledo delfín.

En segundo lugar, los costos de los nuevos escenarios, según la Sociedad Colombiana de Ingenieros, en su informe ( Tabla 62 pag 188), por ejemplo, el Coliseo Mayor, tenía un valor de $ 23, 845 Millardos y ahora costará $ 39.909.984.215, con un costo adicional de 16 millardos y a pesar que las obras funcionales están en el 1.76% según el contrato suscrito durante la administración del nefasto alcalde liberal, Luis H Rodríguez . Igual situación ocurre con las obras de urbanismo que de 13 mil millones pasan a valer 18 mil millones, tal vez por eso, se quería y se obtuvo contralores de bolsillo, con la anuencia de concejales ídem.

Nuestro siempre ponderado alcalde, anuncia que adicionalmente al empréstito aprobado por el Concejo, los recursos provenientes de impuestos, los dineros recuperados por multas o sanciones, lo recuperado a través de las pólizas, rendimientos financieros, lo devuelto por los responsables,  algunos condenados, otros indiciados y otros salvados por las “ias” y aspirantes a la gobernación y alcaldías, tendrá que reunir, quien sabe cómo, al Concejo para que le aprueben cuarenta y cinco  mil millones de empréstito adicional, a los ya aprobado 40 mil, sumados a los 25 mil millones que el Presidente Iván Duque dijo que devolvería, más los 20 mil millones que los parlamentarios consiguieron, estaríamos hablando de una cifra global de… nadie sabe.

El actual Contralor del Municipio, ¿cómo es que se llama? Debería apersonarse de esta situación y que sea una voz oficial de control  que le indique a los Tolimenses, en especial a los Ibaguereños y sobre todo a los deportistas, cuánto realmente cuesta hacer los escenarios deportivos, cómo están financiados, que dineros se cuentan y que hace falta, porque pedirle esta información al Secretario de Hacienda, es inocuo porque a lo mejor la da pero después lo desmienten.

Lamentablemente el alcalde cree que en Ibagué todos somos corruptos y que en hechos históricos, como el anuncio sobre unos tubos, que algunos fueron enterrados para tapar la corrupción y otros siguen pagando arriendo o deteriorándose, prometió su lucha contra ese flagelo, además, comprometiéndose que no sería como Luis H, que no patrocinaría candidatura alguna como sucesor, promesas ambas incumplidas.

El silencio ante el descalabro de la administración anterior  y la ignorancia ante esta, serán aprovechados para un futuro más desalentador, y es, que el Alcalde violando todas las normas éticas y de comportamiento como servidor público de manera descarada piensa dejarnos a su heredero o como dijo una ave voladora: “Que ellos sigan manejando la Alcaldía y nosotros ponemos gobernador”.   

Si “ellos siguen manejando la alcaldía”, no se sabe si los liberales, los del Mais, o lo mismo pero en sentido contrario, como diría la bella filósofa  paisa, Ibagué seguirá  destinada a la construcción de las primeras piedras y que tampoco las cifras por este ítem cuadran.

Foto: EL OLFATO

Fecha: miércoles - 17 abril - 2019