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Las cifras de embarazos en adolescentes de los últimos años mantienen encendidas las alarmas de las autoridades de salud en el Tolima. En 2017, se registraron 184 niñas de entre 10 y 14 años en estado de gravidez.
En 2016 se registraron 170 embarazos en este mismo rango de edad. Por otro lado, en ese mismo año se reportaron 4.117 casos de embarazo en adolescentes de entre 15 y 19 años, en 2017 fueron 3.955. Las cifras de 2018 siguen consolidándose.
Chaparral, Planadas, Rioblanco, Rovira, Fresno, Mariquita y Guamo, son los municipios en donde se han registrado los casos más significativos de embarazos en adolescentes.
Así lo reveló la secretaria de Salud del Tolima, Sandra Liliana Torres, quien entregó esta información en el marco de la Semana Andina de la Prevención del Embarazo “Ser papá y mamá no es cosa de niños y niñas”, con la cual se busca sensibilizar a la población sobre la responsabilidad de traer un hijo al mundo.
La funcionaria explicó que esta semana será vital para poner en boca de toda la ciudadanía las acciones que se adelantan de manera interinstitucional desde su cartera para frenar estas estadísticas. (Ver: Cada día, cuatro adolescentes quedan embarazadas en Ibagué)
“El proyecto por el que se trabaja desde la Secretaría de Salud es el fortalecimiento del ejercicio de la sexualidad de adolescentes y jóvenes de una manera libre y responsable, esto implica que los adolescentes tengan la información oportuna sobre los derechos sexuales y reproductivos, aprendan que el ejercicio de la sexualidad no está ligada al sexo, si no que en un contexto más amplio contempla acciones de autocuidado, prevención de violencias y de género, lo cual se traduce en prevención de embarazo en adolescentes”, explicó Torres.
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Añadió que esta dependencia también fomenta una estrategia cuyo objetivo es llegar a las instituciones educativas para concientizar a la población adolescente frente a este importante tema.
“Estamos realizando una estrategia denominada la ruta del sur que consiste en hacer una intervención directa con los adolescentes y jóvenes en las instituciones educativas ampliando todo el contexto que deben saber sobre sus derechos sexuales y reproductivos”, precisó.
Finalmente, hizo énfasis en que la ley considera el acto sexual con menor de 14 años como un delito, y por ende padres de familia, profesores y demás miembros de la sociedad deben brindar mayor protección a este grupo poblacional.
«La relación sexual con menores de 14 años es un delito, por eso se debe alertar que tanto niños, niñas y adolescentes son susceptibles de ser víctimas de violencia específicamente de la violencia sexual«, concluyó.
