Más de 16 años después de la masacre de las Farc en Puerto Saldaña (Rioblanco), donde perdieron la vida 25 personas, la Fiscalía hizo entrega de los cuerpos de seis de las víctimas a sus familiares en Ibagué.
En una ceremonia lúgubre, en la que los familiares no lograron esconder en sus rostros el dolor de la tragedia, a pesar del paso de los años, la Fiscalía entregó los restos de Arnoldo Garzón Javela, Norbey Garzón Ocampo, Argenis Avilez Loaiza, Yuliana Garzón Ocampo y de dos niños de 4 y 7 años.
Todos eran miembros de una misma familia: Arnoldo era padre de Norbey y Yuliana, mientras que Argeniz era esposa de Norbey. Los dos menores de edad eran hijos de Norbey y Argeniz.
La masacre fue perpetrada por el frente 21 de la extinta Farc el 28 de abril del 2002, en medio de un conflicto territorial entre guerrilleros y paramilitares en el sur del Tolima.
La Fiscalía informó que los cuerpos de 16 de las 25 víctimas ya fueron entregados a sus familias.
Otras víctimas del conflicto
Sin embargo, además de las seis víctimas de esta masacre, la Fiscalía hizo entrega de otros seis cuerpos de personas que murieron en diferentes circunstancias en medio del conflicto armado en el Tolima.
Los investigadores, en coordinación con Medicina Legal, identificaron los cuerpos de Leonardo Valencia Alba, Gabriel Herrera Giraldo, Humberto Capera Culma, José Vicente Suárez Aguirre, José Manuel Celemín Maldonado y David Sánchez Ramírez.
Suárez Aguirre, quien tenía 17 años para la época de los hechos, fue reclutado por las Farc y muerto en combate en el municipio tolimense de Roncesvalles, el 14 de julio del año 2000.
De otro lado, Humberto Capera Culma, de 24 años, murió a manos de paramilitares del Bloque Tolima de las Auc, en febrero del 2002, en zona rural de Ataco. El caso quedó registrado en versiones de tres postulados a Justicia y Paz.
Las investigaciones revelan que los ‘paras’ incursionaron en la casa en la que vivía Capera con su padre. Llegaron fuertemente armados con fusiles, vestidos con camuflados y movilizados en una camioneta.
Para evitar que el padre de la víctima los siguiera lo dejaron amarrado en la casa y se llevaron a su hijo para matarlo bajo señalamientos de que era un supuesto guerrillero.
Sobre el caso de Gabriel Herrera Giraldo, de 39 años, desaparecido el 13 de enero de 1993 en zona rural de Roncesvalles, la Fiscalía estableció que mientras trabajaba en una finca fue asesinado por las Farc y enterrado en una finca ubicada en zona rural de esa municipalidad.
Los cuerpos de las otras dos víctimas no fueron entregados en Ibagué sino en Chaparral y en Rioblanco.
En el municipio del Parque de los Presidentes la Fiscalía entregó los restos de David Sánchez Ramírez, de 30 años, víctima del frente Norma Patricia Galeano de las Farc el 28 de julio de 2001. La víctima estaba realizando un curso para carabinero en la Policía y comenzó a ser blanco de amenazas de la guerrilla, que luego lo desapareció.
Los restos del otro hombre fueron entregados en Rioblanco. La Fiscalía lo identificó como Leonardo Valencia Alba, de 33 años, quien el 19 de marzo de1989 fue ultimado por el Bloque Tolima de las Auc.
Según el expediente, hombres armados lo interceptaron en un establecimiento comercial en Puerto Saldaña, le dispararon con fusiles y lanzaron su cuerpo al río Saldaña. Días después su cadáver fue recuperado.
Los familiares de las 12 víctimas, procedentes de municipios de Tolima y Cundinamarca, tuvieron un acompañamiento psicosocial por parte de psicólogos de la Unidad para las Víctimas (Uariv), la explicación científica forense y orientación en cuanto a temas legales para conocer cuáles son sus derechos.