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El alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, presentó este viernes ocho proyectos de acuerdo para que el Concejo Municipal se los apruebe en tan solo 20 días, tiempo establecido para las sesiones extraordinarias.
Entre las iniciativas aparecen propuestas para otorgar incentivos tributarios a quienes inviertan en la Zona Franca de Ibagué, la creación de un subsidio para los adultos mayores, adquisición de ambulancias públicas y hasta la compra de un predio en el sector de El Tejar, en el sur de la ciudad.
Pero en este paquete de proyectos se incluyó uno que generará una fuerte controversia e impacto entre los 126.369 propietarios de predios de la ciudad.
Jaramillo le pidió al Concejo de Ibagué que decrete 10 obras de infraestructura que los ibaguereños tendrán que pagar a través de la contribución de valorización pero, además, incluyó -hábilmente- dos artículos en los que solicita facultades para hacer un nuevo crédito por $40 mil millones y un cupo “para asumir compromisos con cargo a vigencias futuras (…) hasta por $240 mil millones”.
Esa maniobra encendió las alertas en el Concejo porque el mandatario local mezcló, en un mismo proyecto, la autorización de las obras y amplias facultades de endeudamiento, violando aparentemente el Acuerdo 05 del año 2016, más conocido como el Estatuto de Valorización de Ibagué.
Dicho Acuerdo, en el artículo 16, precisa que cuando el Alcalde solicite “la decretación” de los proyectos viales, el proyecto de acuerdo solo puede contener seis puntos: señalamiento de las obras o proyectos susceptibles de financiación, ordenar los estudios definitivos, determinar el método para la realización del estudio beneficio, convocar una junta de propietarios de inmuebles, sus honorarios y la delimitación de la zona provisional de influencia. (Ver: Estatuto de valorización aprobado en 2016)
Pero el mandatario pasó por alto esta norma e incluyó estos dos polémicos ‘micos’ que impactarían el endeudamiento de la ciudad.
“Solicitaremos de inmediato al equipo jurídico del Concejo de Ibagué que revise el tema. Creemos que este proyecto no tiene unidad de materia, porque el tema principal es la decretación de las obras, pero terminan incluyendo asuntos presupuestales”, dijo el presidente de la corporación, William Rosas.
En el mismo sentido se pronunció el concejal Camilo Delgado. “No pueden pedir autorización para asumir compromisos con cargo a vigencias futuras por $240 mil millones”, expresó.
¿Piden recursos sin tener claro el costo de las obras?
El alcalde Jaramillo busca los recursos para dejar contratadas obras como las intersecciones viales de la carrera Quinta con calle 60 y la calle 25 con avenida Guabinal, la carrera 13, las calles 94 y 103 (uniría al Aeropuerto Perales con Santa Ana), la diagonal 83, ampliación de la avenida Ambalá y hasta la doble calzada con el municipio de Rovira, entre otras.
Y en el artículo segundo del controvertido proyecto, el gobierno local admite no tiene claro el costo definitivo de estas obras, por lo cual solicita: “ordénese a la Administración Municipal la realización de los estudios definitivos de las obras y proyectos”.
Entonces, si no hay estudios definitivos, ¿por qué están solicitando autorizaciones presupuestales hasta por $240 mil millones? Eso se preguntan varios concejales.
“Sin saber cuánto cuestan obras, quizás nosotros no podríamos estar hablando de empréstitos. En este momento ese valor no se tiene”, afirmó Rosas.
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También hay otro hecho que llama poderosamente la atención. El pasado 27 de octubre, el secretario de Hacienda, Juan Espinosa, entregó una cifra muy diferente a la que hoy pretende ejecutar la Alcaldía de Ibagué en las obras de valorización. (Ver: Más de $150 mil millones espera recaudar la Alcaldía de Ibagué a través de valorización)
Hace tres meses, según Espinosa, el recaudo esperado era de unos $184 mil millones, pero en menos de 90 días el presupuesto se disparó a $240.000 millones.
“Este conjunto de intervenciones tienen un costo aproximado de $184 mil millones. La Administración Municipal aportaría $30 mil millones y el excedente los contribuyentes”, explicó en ese momento el funcionario.
Precisamente, buscamos al Secretario de Hacienda para que explicara esa millonaria diferencia, y no fue posible contactarlo.
La misma estrategia de Luis H. y los Juegos Nacionales
Guillermo Alfonso Jaramillo pretendería emplear la misma estrategia que utilizó su antecesor Luis H. Rodríguez con los Juegos Deportivos Nacionales de 2015.
El actual mandatario tendrá este año para realizar los estudios de los 10 proyectos viales que pretende ejecutar y, si las cosas le salen bien, en el año 2019 podría montar y adjudicar las millonarias licitaciones.
Lo mismo hizo Luis H. Rodríguez, quien abiertamente dijo que a él solo le importaba dejar obras contratadas y en ejecución, para que las terminara su sucesor.
“Si el doctor Jaramillo quiere que haya transparencia, debería dejar todo el trámite hecho, los estudios terminados, pero que las obras las contrate el próximo Alcalde de Ibagué. No son buenos esos afanes en la contratación de proyectos tan grandes. En los Juegos Nacionales era $140 mil millones y ahora son $240 mil millones”, solicitó el analista Eduardo Bejarano.
Esta semana, los concejales tendrán que analizar si este proyecto de acuerdo tendría que ser retirado o si existe alguna alternativa jurídica para debatirlo con los dos micos que le colgó el alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo.
