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El concejal Pedro Mora indicó que los cuatro cabildantes que no fueron suspendidos por la Procuraduría están listos para iniciar a sesionar el próximo 1 de marzo, siempre y cuando el alcalde Jaramillo no convoque a sesiones extraordinarias.
“Estamos listos, gozamos de la plena investidura constitucional para sesionar, de tal manera que estaremos el 1 de marzo contestando a lista y prestos a asumir las labores que tenemos que hacer”, afirmó el cabildante.
Entretanto, Mora indicó que tras la emisión del comunicado por parte de la Procuraduría, en el que se notificó a los concejales sancionados, el presidente del Concejo encargado, Juan Pablo Salazar, deberá ahora expedir los actos administrativos que permitan la reorganización de la mesa directiva de la Corporación.
“Hay que determinar si se debe recomponer la mesa directiva, porque dos concejales que la integraban hacen parte del proceso de suspensión. Vamos a mirar cómo se tiene que hacer la recomposición de las distintas comisiones y oficializar lo que tiene que ver con la ordenación del gasto para que puedan pagarles a los funcionarios y pueda empezar a funcionar la parte administrativa porque el Concejo estaba completamente parado”, subrayó.
Así las cosas, para este viernes se estarían apropiando las facultades para la reorganización administrativa del Concejo de Ibagué y de esta forma iniciar labores al interior de la Corporación.
“Esperemos que hoy (jueves) queden apropiadas las facultades para que se le dé tramite a la parte administrativa que es la que más nos preocupa, y que por supuesto, el alcalde se entere de que prácticamente estamos institucionalizados para que en el momento que él lo vea conveniente, pueda convocar al Concejo a extraordinarias o esperar hasta las sesiones ordinarias. Creo que ya estamos listos para cualquier convocatoria”, agregó.
De esta forma se busca normalizar el funcionamiento administrativo del Concejo de Ibagué, que ante la situación atípica que enfrenta por la suspensión de 15 concejales, se encuentra parado y sin el pago de honorarios a empleados.
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“Ya por lo menos tenemos certeza de que arrancamos y el Concejo tendrá que vivir la experiencia nueva, sin normatividad entrar a sesionar y asumir las responsabilidades constitucionales, y así seamos solo cuatro concejales, toca estar predispuestos a iniciar las sesiones a la hora que el alcalde considere que debe convocar”, sostuvo Mora.
En cuanto al control político al interior de la Corporación, el cabildante señaló que es preocupante la falta de normatividad para que los concejales puedan actuar sin ningún tipo de prevención.
“Va a ser muy difícil porque reducir 19 concejales a solo cuatro, implica que se nos va a incrementar el trabajo. Lo que más nos llama la atención es que no hay normatividad que nos permita actuar sin ninguna prevención», explicó.
«Todos los actos que haga el Concejo van a tener que estudiarse muy bien pues debido a esta situación hay una vulnerabilidad que nos exige acogernos a los conceptos del Consejo de Estado para que no vayamos a tener dificultades”, concluyó.
