El comprador de libros viejos de La Pola

En estos tiempos en que hasta los textos se volvieron digitales, el señor Heladio Ruíz descubrió que la compra y venta de libros usados de todo tipo podía llegar a ser un buen negocio. Por eso, en este lugar de La Pola se pueden encontrar volúmenes de literatura, ciencia política, psicología, derecho y hasta enciclopedias. Entre sus compradores se encuentran personas de todas las edades, desde jóvenes universitarios hasta adultos mayores.

Hace 13 años don Heladio decidió montar un negocio de café internet luego de haber pasado una temporada alejado de la congestión urbana. Cuando empezó con este proyecto no sabía muchas cosas de tecnología, pero en el proceso fue aprendiendo sobre informática y también de estrategias para que su negocio creciera y fuera rentable. Desde su inauguración el local ha estado ubicado en la carrera Tercera con calle tres en el barrio La Pola.

Algún día y por cuestiones de casualidad un vecino suyo le comentó sobre unos libros que tenía almacenados y que solo le quitaban espacio en su casa. “Él vino y me propuso que se los recibiera porque le estaban haciendo estorbo”, comenta. Fue así como Heladio decidió recibirlos y exponerlos a los curiosos visotantes en una mesa de su local.

Con el paso de los días, las personas que se acercaban a los libros terminaban interesadas por los mismos y los compraban. De esta manera, en muy poco tiempo todos los volúmenes se vendieron. Por eso, desde ese momento, colgó un letrero en la puerta de su local que dice “se compran libros”.

Y es que cada vez son más las personas que se acercan a venderle libros que por una u otra razón ya no quieren conservar. Por esta razón, don Heladio cuenta con una gran variedad de ejemplares que van desde enciclopedias para niños hasta ediciones antiguas de joyas de la literatura como Balzac o Hemingway. Es por esto que hasta allí van todo tipo de lectores en búsqueda de textos que pueden ser de su interés: “Por aquí pasan estudiantes universitarios, jóvenes de colegio y hasta adultos mayores que son buenos lectores y todavía disfrutan de los libros en papel”.

Biólogo y pintor

Don Heladio es biólogo graduado de la Universidad Javeriana, pero una de sus grandes pasiones es pintar: “Soy autodidacta y me gusta pintar retratos. Una parte de mi vida me costeé mis gastos haciendo pinturas y vendiéndolas”, agrega. Su técnica es de óleo sobre lienzo y asegura que aprendió todo por su cuenta, leyendo sobre arte y pintando.

Comenta que nunca se dedicó a la Biología: “Me di cuenta que era muy difícil encontrar trabajo en el campo en el que yo quería ejercer. Además estaba buscando un ambiente tranquilo, alejado de las grandes urbes para descansar, reflexionar y pintar”. Por este motivo, estuvo viviendo en una zona de paramo en Boyacá durante varios años, donde perfeccionó la técnica de su pintura y encontró calma.

Todo un rebuscador

Heladio ha conseguido que su negocio se vaya adaptando a las diferentes necesidades de los ciudadanos. Por tal razón, en el local hay servicio de internet, llamadas, fotocopias y hasta clasificados de venta de varios artículos y arriendos.

“A medida que descubro que puedo ofrecer algo más, lo hago, porque es cuestión de sentido común darse cuenta de lo que la gente se acerca a pedir”, dice.

Sumado a esto, Heladio hace todo tipo de trámites por internet: puntaje del Sisbén, pasado judicial, consulta de comparendos e infracciones, giros y pago de facturas. Aunque si usted como cliente quiere tomarse un tinto, un café con leche o una aromática también lo puede hacer en este local.