La jornada electoral en Ibagué inició con una imagen nunca antes vista desde que Óscar Barreto y Guillermo Alfonso Jaramillo están en el poder.
Durante la apertura de los comicios, el gobernador del Tolima y el alcalde de Ibagué, dos rivales políticos, antagonistas casi siempre, se dieron un abrazo y las cámaras de EL OLFATO los captaron hablándose al oído. La escena sorprendió a todos los asistentes.
Una de las personas que estaba cerca de los dos mandatarios escuchó que uno temas de conversación fue el incierto Festival Folclórico Colombiano, certamen que apenas se encuentra en etapa de contratación en ambas administraciones. (Ver: Gobernación del Tolima tiene más enredada la licitación para las fiestas que la Alcaldía de Ibagué)
Después de los actos protocolarios, Barreto y Jaramillo salieron a votar. El primero lo hizo en la sede del Conservatorio y el segundo en la Universidad Cooperativa.
Tal parece que el alcalde de Ibagué y el gobernador del Tolima tendrán mejores relaciones durante los 583 días que le restan a sus administraciones.
Madrugaron a votar, pese a la lluvia
La primera vuelta presidencial despertó el interés de los votantes en Ibagué. Desde muy temprano, pese a la lluvia, hubo buena participación de electores.
En la universidad CUN llegaron deportistas en bicicleta, quienes cumplieron con su deber democrático antes de salir a hacer ejercicio.
También madrugaron a votar los adultos mayores, muchos de ellos acompañados por sus familiares.
Las religiosas acudieron a las urnas de los puestos de votación del centro de Ibagué, principalmente en la Universidad Cooperativa.
En Ibagué, hubo más de 1.100 agentes de la Policía encargados de custodiar los 71 puestos de votación. Según el coronel Jorge Eduardo Esguerra, comandante de la Policía en el Tolima, durante esta jornada no se presentaron capturas por delitos electorales.