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El cuestionado exdirector de Coldeportes, Andrés Botero, salió mal librado en un reciente informe elaborado por la Contraloría General de la República y en el que queda en evidencia su pobre y omisiva gestión durante la millonaria defraudación de los Juegos Deportivos Nacionales del año 2015.
Botero, quien siempre defendió la gestión del exalcalde Luis H. Rodríguez, es recordado por haber prometido que en Ibagué se realizarían los mejores Juegos Nacionales de la historia, pese a que en cada una de sus visitas evidenció que las obras del Parque Deportivo y la Unidad Deportiva de la 42 no avanzaban al ritmo necesario. (Ver: Director de Coldeportes visitó el Parque Deportivo y no encontró ningún avance)
Según el informe de la Contraloría, durante la organización de los Juegos Nacionales en el Tolima el seguimiento y la vigilancia por parte de Coldeportes fueron deficientes, sobre todo en lo que respecta a la ejecución de los escenarios deportivos, situación que derivó en millonarias obras inconclusas y problemas con la liquidación de los contratos.
«Falta de evaluación, seguimiento y control de los contratos suscritos en el departamento del Tolima (Ibagué, Líbano, Chaparral, Melgar y Espinal) para la realización de las actividades relacionadas con los XX juegos nacionales y VI Paranacionales, por parte de la Administración Municipal y del Imdri, y de la supervisión de Coldeportes», dice el informe. (Ver: En los Juegos Nacionales de Ibagué se habrían perdido $62.899 millones: Contraloría)
De igual modo, la Contraloría señala que las irregularidades y los malos manejos administrativos al interior de Coldeportes durante la vigencia 2015 ascienden a los $35.502’757.287. Por ese motivo, funcionarios de dicha entidad podrían resultar inmersos en procesos disciplinarios, fiscales y hasta penales.
Una de las irregularidades más graves, según la Contraloría, es que Coldeportes hubiese desembolsado anticipos de los Juegos Nacionales al Imdri y no a la Alcaldía de Ibagué, toda vez que la ley establece que los convenio deben ser firmados entre el Gobierno Nacional y los entes territoriales. (Ver: Se conocen nuevos detalles del “conejo” de Typsa a Ibagué, según la Contraloría)
«No se exigió el cumplimiento de los requisitos establecidos en los convenios para realizar los respectivos desembolsos (…) Por incumplimiento de los convenios por parte del Municipio, indebida actuación del Imdri, falta de vigilancia y control de Coldeportes, lo que generó que el contratante de las obras careciera de capacidad técnica, jurídica y financiera para el desarrollo de los proyectos contratados, deficiencias en la vigilancia y control de las obras contratadas y riesgo en los recursos estales invertidos«.
Mala organización
Pero además de las irregularidades en los contratos de obras de los Juegos Nacionales, la Contraloría advierte que también se presentó negligencia en todo lo relacionado con la logística de las justas, especialmente en lo que tiene que ver con el convenio por $21.957’228.640 con Plaza Mayor Medellín, que tenía por objeto la organización del evento deportivo. (Ver: Coldeportes ratifica la devolución de recursos para la terminación de los escenarios de Juegos Nacionales)
«Vulneración de requisitos de perfeccionamiento y ejecución en el contrato suscrito para ejecutar actividades de los componentes administrativos, técnicos, logísticos y financieros requeridos para la organización de los XX juegos deportivos nacionales y IV Paranacionales 2015; así como las requeridas para realizar los desembolsos del contrato«.
Y agrega la Contraloría que Coldeportes tampoco supervisó que los implementos deportivos que se compraron para los Juegos Nacionales se hubiesen conservado de manera adecuada, sobre todo debido a la no terminación de las obras de los escenarios.
«Incumplimiento de las obligaciones pactadas en el contrato, relacionadas con la custodia de los bienes adquiridos y específicamente los correspondientes a la implementación deportiva; no se evidencia control y seguimiento adecuado a la destinación de la implementación deportiva, la cual se entregó sin especificaciones del buen uso y manejo y adecuada conservación de los mismos«.
¿Favorecimiento entre ‘paisas’?
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Si bien durante la organización de los Juegos Nacionales se conoció que Coldeportes había firmado un convenio interadministrativo con Plaza Mayor Medellín, lo que no se sabía era que dicho convenio también contemplaba actividades como la adquisición de millonarios implementos deportivos.
De acuerdo con la Contraloría, una de las cláusulas del convenio tenía que ver con la adquisición de canchas de Squash por parte de Plaza Mayor Medellín, entidad que terminó comprando dichos implementos deportivos con un contratista de la República Checa. (Ver: Coldeportes se lleva inversión de las canchas de squash porque los escenarios no están listos)
«Las canchas fueron adquiridas mediante contrato suscrito por Plaza Mayor Medellín, con el proveedor de la Republica Checa ASB squash, por $742.113.444 de acuerdo con las facturas: 150030 por $315.890.700, 150019 por $426.222.744, ambas del 10-11-15. Adicionalmente, Plaza Mayor Medellín canceló $158.000.000 por concepto de importación y nacionalización, es decir el costo de estas canchas asciende a $900.000.000«, dice la Contraloría.
Sin embargo, lo que más llama la atención es que las millonarias canchas de Squash, así como otros implementos de esta misma disciplina, fueron adquiridas un mes después de que se terminaran los Juegos Nacionales.
«Se presentan deficiencias en la planeación, supervisión, control y seguimiento que debía realizarse a la adquisición de la implementación deportiva, ya que la misma fue adquirida, de conformidad con la factura, un mes (1) después de haberse realizado las competencias, las cuales se desarrollaron entre el 06 y 14 de noviembre de 2015; ni se evidencia acta de entrega en custodia por parte de Plaza Mayor Medellín de esta implementación. Por lo anterior, el hallazgo tiene presunta connotación disciplinaria».
Coldeportes no cumplió sus objetivos
Con respecto a la gestión realizada por Coldeportes durante el año 2015, y que estuvo a cargo de Andrés Botero, la Contraloría señala que no se cumplió con ninguno de los objetivos que se había planteado dicha entidad, puesto que no se vieron resultados destacados en el fomento del deportes en el país y tampoco se culminó la infraestructura de los Juegos Nacionales.
«Las deficiencias anotadas de mecanismos y herramientas de control y seguimiento, generan descontrol, falta de coordinación, desarticulación y dificultan el seguimiento, evaluación y medición del desempeño institucional y no permiten que el Plan de Acción se constituya en un instrumento gerencial que contribuya con la oportuna toma de las decisiones y direccione e implemente correctivos a los procesos, acciones, estrategias encaminadas al logro metas y objetivos«, asegura la Contraloría.
