Yalesa Echeverría, la ibaguereña que con su empresa El Roble ha participado en el montaje del Festival Iberoamericano de Teatro y conciertos de artistas como Juanes, Carlos Vives y Shakira, decidió no participar en la polémica licitación que montó la Alcaldía de Ibagué para contratar al operador de la edición 46 del Festival Folclórico Colombiano.
No obstante, la empresaria radicó un documento ante la Alcaldía de Ibagué en el que advierte graves irregularidades en el proceso contractual de $1.447 millones. (Ver: Festividades folclóricas del Ibagué están en la cuerda floja)
Echeverría sostiene que la licitación no es objetiva y carece de planeación. “Hemos sido parte de la organización del Festival en dos años representados por la gerencia general y es la primera vez que observamos que un evento de esta magnitud se pretende organizar en menos de 15 días y con unos requerimientos técnicos imprecisos y con exigencias que no permiten la objetividad del mismo”, denunció la representante de El Roble.
Reveló que, además de la falta de planeación, el cronograma de la licitación no se ha cumplido y tampoco han entregado respuesta a las observaciones que hizo su empresa. (Ver: «Comienzan a joder porque soy petrista», dice Jaramillo a críticos por improvisación de las fiestas de junio)
“El cronograma determinaba en prepliegos apertura del proceso el 20 de abril, audiencia de aclaraciones el 25 de abril; en esta fecha la entidad nunca se pronunció para el cambio de fechas y no había publicado el pliego definitivo. Solo hasta el jueves 3 de mayo publicaron los pliegos anunciando audiencia el lunes 7 de mayo a las 4:00 de la tarde. ¿Es este el procedimiento correcto para un proceso de esta dimensión?”, se preguntó.
Asimismo, narró que el día 7 de mayo a las 4:00 de la tarde llegaron a la audiencia de asignación de riesgos, como estaba en los pliegos, pero en ese momento se enteraron que la misma se había llevado a cabo a las 10:00 de la mañana. “Observamos en la Adenda 1 que sólo se presentó un posible oferente y una persona natural. Preguntamos: ¿cómo se enteraron?”, dijo en su escrito. (Ver: Yalesa, la ibaguereña que triunfa en el mundo del espectáculo)
“En vista de que la entidad cambió las fechas de la audiencia sin previo aviso, yendo en contra del debido proceso y afectando la participación de oferentes interesados en el desarrollo del proyecto, extendimos las inquietudes en documento que dejamos radicado al que a la fecha -jueves 10 de mayo- no contamos con ninguna respuesta”, aseguró.
Proyecto de “muy alto riesgo”
Yalesa, con todo su recorrido en la organización de eventos, sabe que en un certamen de esta dimensión no hay lugar para la improvisación. Por eso, ha cuestionado a la Alcaldía de Ibagué por no determinar el tiempo de ejecución del festival, ni los días en los que se llevará a cabo cada evento.
“Según el cronograma, el 30 de mayo se adjudica (el contrato) y en tres días se firma el contrato. Si lo vemos en una labor de preproducción rigurosa y segura se tendría 20 días calendario para organizar mínimo seis actividades masivas, la construcción de 17 carrozas y la gestión de permisos de todo este proceso”, puntualizó Echeverría.
Y surge otra inquietud. Las normas locales establecen que la solicitud de permisos debe hacerse “mínimo 10 días” antes del evento. Entonces: ¿Cómo hará el organizador? ¿Habrá permisos exprés para ocultar la improvisación?
“Por lo anterior y evidenciando que es un proyecto de muy alto riesgo, que la entidad hace incurrir a los posibles proveedores en errores ante la ausencia de planeación y que la objetividad de evaluación no es evidente, El Roble Producciones S.A.S. (…) no se presenta a este proceso”, concluye la misiva, radicada el 11 de mayo, a las 9:47 de la mañana, en la oficina de Contratación de la Alcaldía de Ibagué.
Se presentaron tres oferentes
A pesar de todas estas irregularidades, tres firmas decidieron participar en este cuestionado proceso licitatorio, que está siendo analizado detalladamente por la Fiscalía y la Procuraduría General de la Nación. (Ver listado de proponentes)
Los interesados son: León Gráficas, la empresa de Santiago Romero; Grupo de Servicios Logísticos S.A.S. y Cyan eventos y logística.