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La extracción ilegal de carpetas de contratación del Instituto Libanense para la Recreación y el Deporte (Ilider) generó versiones contradictorias por parte las autoridades de ese municipio del norte del Tolima, hecho irregular que ya está en la mira de fiscales en Ibagué. (En extraño robo desaparecieron archivo de contratos de Juegos Nacionales en el Líbano)
Tras la revelación hecha este lunes por EL OLFATO, el director del Ilider, Wolfang Sánchez, emitió un rápido comunicado en el que aceptó que de esa entidad desaparecieron “unos documentos correspondientes al proceso de contratación de los Juegos Campesinos del año 2016”, y negó que se tratara de soportes de la ejecución de las obras de los Juegos Deportivos Nacionales en el Líbano, como lo revelaron fuentes oficiales a esta redacción.
En su boletín de prensa, de seis puntos, el funcionario de la Alcaldía del Líbano sostuvo que le hecho fue puesto en conocimiento de la Policía de ese municipio, “los cuales envían a su grupo de investigación para evaluar la situación y continuar con el proceso de denuncia”.
El jefe de la Sijín dice que no sabía nada del caso
A las 2:40 de la tarde del lunes, un intendente de la Policía del Líbano, quien se presentó como jefe de la Sijín en ese municipio, llamó al teléfono personal del periodista responsable del artículo y le dijo que él estuvo de turno todo el fin de semana y que desconocía el hecho denunciado por EL OLFATO.
El número telefónico, al parecer, se lo suministró el director del Ilider, Wolfang Sánchez, quien pretendía que la Policía le “colaborara” desmintiendo la publicación.
“A mí me llegan todas las denuncias y ese caso no lo conocíamos aquí”, dijo muy seguro el uniformado.
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Sin embargo, minutos después (3:11 de la tarde), cuando el periodista le envió al jefe de la Sijín del Líbano el comunicado emitido por el director del Ilider, en el que claramente se dice que la Policía sabía del caso, el uniformado cambió su versión.
El intendente recordó que sí conoció del caso y que envió a su personal, pero que no hubo ninguna denuncia porque extraer documentos oficiales de una entidad del Estado, para él, no es un delito.
“Como no es que hayan violentado ninguna chapa, ni que hayan ingresado, sino que hay un documento perdido, entonces eso no da para que sea un hurto, ni para que sea un delito penal”, aseguró el uniformado.
Lo cierto de todo este caso es que algo no anda bien en el Instituto Libanense para la Recreación y el Deporte, entidad en la que estarían desapareciendo carpetas de contratación, y la Fiscalía General de la Nación ya está tras la pista de este caso.
