El contralor departamental del Tolima, Edilberto Pava, celebró este fin de semana su cumpleaños en el municipio de Honda, acompañado por sus familiares y amigos más cercanos, entre ellos, dos de las cabezas más visibles de la organización política del gobernador, Óscar Barreto.
Al acto social, asistieron nada más y nada menos que el representante a la cámara Miguel Barreto y Mauricio Pinto, el hombre de confianza del mandatario departamental, y quien se encuentra inhabilitado por la Procuraduría.
La presencia de Miguel Barreto y Mauricio Pinto confirman la estrecha relación de amistad que existe entre el contralor Edilberto Pava y el gobernador Óscar Barreto, en otras palabras, entre vigilante y vigilado.
Hay que recordar que la relación de Pava y Barreto viene desde el año 2008, cuando el ahora Contralor Departamental fue empleado de Óscar Barreto, en su primera administración. Edilberto Pava se desempeñó como Director de Participación Comunitaria. (Ver: Exempleado de Óscar Barreto es ahora su contralor)
El año pasado, los dos políticos hicieron campaña juntos, pese a que pertenecían a equipos políticos diferentes. Edilberto Pava fue candidato a la Alcaldía de Honda por el partido de La U e hizo fórmula en ese municipio con Óscar Barreto, quien fue avalado por los partidos Conservador y Centro Democrático.
Esa alianza entre uribismo y santísimo se logró por la mediación del representante Carlos Edward Osorio, congresista de La U y jefe político de Pava. Por eso, para nadie es un secreto que la Contraloría Departamental del Tolima la manejan Osorio y Barreto.
Soy amigo pero no ‘alcahueta’
El contralor Edilberto Pava reconoció que existe una relación de amistad con la cúpula del barretismo pero que eso no significa que sea ‘alcahueta’ con la administración de Óscar Barreto.
Aseguró que la independencia de la Contraloría Departamental del Tolima está garantizada y que «no le temblará la mano» para sancionar a los funcionarios que incurran en faltas contra el patrimonio público.