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Los representantes de 10 veredas ubicadas en el Cañón del Combeima y los cerros noroccidentales de Ibagué firmaron este lunes un pacto con Cortolima para la restauración de ecosistemas estratégicos ubicados en áreas de las cuencas de los ríos Coello y Totare.
Como parte del proyecto, los voluntarios restauraron 170 hectáreas a través de la plantación de árboles. También se protegieron otras 5.185 hectáreas en áreas de gran importancia ecológica.
Para este propósito, fue necesario el trabajo articulado entre las juntas de acción comunal y los voluntarios provenientes de 10 veredas de Ibagué: “Es muy fácil contratar con ONG o instituciones, pero preferimos contratar la mano de obra de quienes conocen las cuencas,” aseguró el director de Cortolima, Jorge Enrique Cardoso.
En la actividad participaron habitantes de las veredas de Juntas, Villarestrepo, Llanitos, Cay, El Cural, La Plata, Alaska, Chembe, Carrizales y China Alta. En total, han sido beneficiadas más de 5.000 personas de todas las edades a través de talleres, capacitaciones y jornadas educativas.
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Así pues, dentro de los beneficios y resultados que presenta este proyecto de restauración de ecosistemas estratégicos se encuentra la protección de 7.438 hectáreas de zonas ambientales de la ciudad de Ibagué.
Además, se han establecido 120.000 metros lineales de aislamiento de predios que son propiedad del Municipio, Cortolima, Asocombeima, Corcuencas o el Ibal. También se realizó la reforestación de 170 hectáreas como medida para la conservación de la zona boscosa.
