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Las nuevas construcciones de Ibagué que tengan agua de acueductos comunitarios, tendrán dificultades para la expedición de sus licencias en las curadurías urbanas.
Así lo manifiesta el decreto 194 del 3 de abril del 2018, expedido por la Secretaría de Planeación, por medio del cual se solicita a las constructoras que certifiquen la disponibilidad de agua potable al momento de solicitar los permisos de construcción.
“El objetivo del decreto es que exista agua potable en todo el perímetro urbano de la ciudad. Con esto le pedimos a los acueductos comunitarios que garanticen el recurso hídrico para que los urbanizadores y constructores puedan tramitar las licencias”, dijo Ismael Molina, director del Plan de Ordenamiento Territorial de la Secretaría de Planeación.
Para conocer si el agua suministrada es apta o no para el consumo humano, la Secretaría de Planeación, mediante resolución trimestral, dará a conocer el reporte sobre Índices de Riesgo de Calidad de Agua para Consumo Humano (IRCA). Este informe será suministrado por la Secretaría de Salud municipal.
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“No podemos seguir permitiendo que se sigan entregando licencias de construcción de urbanismo para algunos constructores que están desarrollando proyectos en áreas donde no hay agua potable. No queremos que sigan engañando a la ciudadanía y tampoco continúen generando un problema de salud pública”, dijo Molina.
Por su parte, el presidente de Camacol Tolima, Veliz Mejía, explicó que este decreto no afectará a los actuales proyectos de vivienda que se desarrollan en la capital tolimense, sino a los nuevos.
