Pese a que el centro de la ciudad es uno de los sectores más concurridos por los ibaguereños, transitar por estas vías continúa siendo una de las tareas más difíciles para miles de ciudadanos que deben circular por carreteras que siguen usándose como parqueaderos públicos.
Un claro ejemplo de esta situación se evidencia en el sector de la calle 11 entre carreras Segunda y Quinta, en donde los conductores de carros y motos deciden estacionar sus vehículos en los dos costados de las vías, generando largos trancones que se agudizan en las horas ‘pico’.
Algo similar ocurre entre las calles 12 y 14 con carrera Cuarta, la calle 13 entre carreras Quinta y Sexta, y en muchos más sectores del centro de la ciudad en los que es común que se dificulte la movilidad por la falta de cultura ciudadana de los ibaguereños.
Ante esta situación, el director Operativo de la Secretaría de Tránsito de Ibagué, Manuel Sánchez, afirmó que por estos sectores se realizan operativos periódicamente con el fin de descongestionar las vías, pero la falta de unidades policiales no alcanza a cubrir todas las zonas de la ciudad en las que se presenta esta problemática.
«En este sector se hacen operativos aleatorios. Lo que pasa es que simultáneamente es imposible atender la ciudad con el cuerpo humano que se tiene. Hay demasiados puntos que atender, estos operativos no son de media hora, tienen que realizarse en todo un día para que tengan éxito», señaló Sánchez.
Además, afirmó que la falta de cultura ciudadana en Ibagué no ayuda a que haya una movilidad adecuada en las calles de la ciudad.
«En Ibagué las personas parquean por horas en sectores públicos, teniendo lugares en donde dejar su carro seguro sin obstaculizar la vía de los demás vehículos. Esto hace que la ciudad se este convirtiendo en un caos», dijo el Director.
De esta manera, indicó que en lo corrido del 2017 se han realizado cerca de 12.000 comparendos a conductores por estacionar en lugares prohibidos, quienes han debido pagar multas de $368.000, más la inmovilización del vehículo abandonado.
En este sentido, parece que el estacionamiento en las calles de Ibagué será siempre un dolor de cabeza tanto para peatones como para conductores que deben hacer maniobras si quieren transitar por espacios estrechos que son invadidos por ibaguereños sin cultura ciudadana.