Al abogado Orlando Arciniegas Lagos, condenado a 36 años de prisión por el desfalco de los Juegos Deportivos Nacionales de Ibagué, se le acabaron los lujos y beneficios que tenía en la cárcel La 40 de Pereira.
Desde el pasado sábado ya no tiene acceso a equipos como computadores y teléfonos celulares, a través de los cuáles concedía entrevistas a emisoras de la ciudad para defender a Luis H. Rodríguez, su amigo y jefe. (Ver: Arciniegas dijo que se quiere suicidar y absolvió de toda culpa a Luis H.)
Después de 13 meses de reclusión en la cálida capital de Risaralda, Arciniegas Lagos fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Cómbita, en Boyacá, donde la temperatura oscila entre los 10 y los 15 grados centígrados. (Ver: Inpec trasladó a Orlando Arciniegas a la cárcel de máxima seguridad de Cómbita)
Su nueva celda es de dos metros de ancho por tres metros de fondo y debe compartirla con otro interno. Las camas son de concreto en forma de camarote, insertas en la pared. Tiene una taza de baño en aluminio, un lavadero con un mesón y dos repisas, informó el Inpec.
La cárcel de Cómbita es un centro penitenciario tipo americano, lúgubre y con medidas fuertes de seguridad.
Allí han estado detenidos peligrosos delincuentes como Jhon Jairo Velásquez, alias Popeye, y Emilio Tapia, el cuestionado contratista que participó en el desfalco de Bogotá, durante la administración de Samuel Moreno Rojas, del Polo Democrático.
La rutina de Arciniegas
A las 5:00 de la mañana, Orlando Arciniegas debe salir de su celda para el habitual conteo de internos que se lleva a cabo en los patios de cada pabellón.
Una vez termina este procedimiento de seguridad, Arciniegas y el resto de detenidos pasan a los comedores para recibir el desayuno, dijo una fuente del Inpec.
Después, a las 11:00 de la mañana, regresan al comedor para recibir el almuerzo y la comida la sirven a las 3:30 de la tarde. «A las 4:00 de la tarde ya todos los detenidos tienen que estar de nuevo en sus celdas«, informó la fuente del Inpec a ELOLFATO.COM.
Por ahora, Arciniegas no está obligado a utilizar el overol que le entrega el Inpec a los detenidos de la cárcel de Cómbita, pues su fallo aún está en etapa de apelación.
Una vez quede en firme su condena, el otrora todo poderoso asesor de la Alcaldía de Ibagué tendrá que llevar -por muchos años- el uniforme que le entregan a los condenados.