Cerca de 2.000 mujeres mueren cada año en Colombia a causa del cáncer de cuello uterino

Este martes 26 de marzo se celebra en el mundo el día del cáncer de cuello uterino producido por el virus del papiloma humano, una patología que en Colombia ocupa el segundo lugar en muertes por cáncer con 4.462 casos nuevos y 1.861 muertes cada año.

Panorama que no es alentador y que cada año se agrava por la falta de prevención. Solo en 2018 murieron cinco mujeres cada día y se diagnosticaron más de tres mil nuevos casos de esta patología.

«Resulta incomprensible que una enfermedad que se puede prevenir con una vacuna que en Colombia es gratuita (incluida en el plan ampliado de inmunización), acabe cada año con la vida de cerca de dos mil colombianas. El cáncer de cuello uterino ocupa el segundo lugar a nivel mundial en la población femenina tanto en incidencia como en muertes. 527.672 casos nuevos al año y 265.672 muertes», destacó la Liga Colombiana de Lucha contra el Cáncer.

Según la institución, en el país se dictaminan unas 5.500 mujeres con carcinoma año tras año, de las cuales mueren entre 2.000 y 2.500. En América Latina y el Caribe, por ejemplo, donde el año pasado se reportaron 72.000 casos nuevos y fallecieron 34.000 mujeres por este tipo de granuloma, la tasa de mortalidad es tres veces más alta que en Norteamérica.

Es muy importante tener en cuenta que el virus puede ser adquirido en la adolescencia o juventud y manifestarse años o hasta décadas después de ser adquirido, tal como lo explica el doctor John Alberto Marulanda, asesor médico de la Liga Colombiana Contra el Cáncer.

“En general todos los seres humanos a partir de las primeras relaciones sexuales hemos tenido contacto con el virus; en algunos de nosotros, particularmente las mujeres, el virus persiste. Esa persistencia es la causante al cabo de los años del cáncer de cuello uterino. Podemos decir que más del 80% de las personas hemos tenido contacto con el virus, pero algunas personas no son capaces de sacarlo porque el sistema inmunológico no lo ataca”, explica el profesional.

Una persona con el virus del Papiloma Humano no experimenta síntomas, así como tampoco los experimenta la mujer con cáncer de cuello uterino en sus etapas tempranas. El cáncer de cuello uterino es una enfermedad silenciosa que provoca un crecimiento anormal y acelerado de las células del cuello del cérvix y que cuando se manifiesta, con síntomas como dolor, sangrados anormales y cambios en el flujo vaginal, es porque ya está muy avanzado y será más difícil y menos efectivo el tratamiento.

“El cáncer de cuello uterino es curable cuando se detecta muy temprano, y se puede evitar con la vacuna. La vacuna evita la infección del VPH o hace que aquellas mujeres que no iban a tener una respuesta adecuada frente al virus la tengan. Si se pasó esa barrera y el virus se implantó y de alguna manera pasan los años y se empieza a desarrollar cáncer, la citología es capaz de detectar los cambios microscópicos que produce el virus en las células del cuello de cuello uterino”, explica el doctor Marulanda, quien es enfático al decir que teniendo en cuenta que hay medidas preventivas y de detección es que “las mujeres no se deberían morir de cáncer de cuello uterino”, destaca el médico.

Es muy importante que las mujeres se cuiden a sí mismas, y que los hombres ayuden a cuidarlas. Debemos pensar en nuestras hijas, madres, hermanas. Se puede prevenir la infección por VPH con una vacuna que en Colombia es gratuita para niñas entre 9 y 18 años (está incluida en el POS).

Detección

Ante el panorama de este cáncer en el país, Profamilia anunció que, por primera vez, las colombianas tendrán acceso a una de las pruebas más sofisticadas que existen para identificar qué tan en riesgo están por el Virus del Papiloma Humano, que actualmente es el culpable del 70% de los casos a nivel global de cáncer cervical.

Se trata de la implementación del diagnóstico molecular para la detección temprana del virus del Papiloma Humano, una prueba altamente sensible, “usada en Estados Unidos y Europa, la cual tiene mayor capacidad para advertir el riesgo presente y futuro antes de que éste genere las lesiones en el cuello uterino que facilitan la aparición del cáncer”, explicó la entidad.

El gran beneficio de este proceso es que existen casos en que las mujeres pueden tener el virus y aun así no presentar cambios celulares. La prueba, sin embargo, detectaría eso para que esa paciente tenga un seguimiento preventivo.

De acuerdo con Profamilia, este diagnóstico se implementará cuando las mujeres en edad de riesgo – entre 30 y 65 años– acudan a una consulta de prevención de cáncer de cuello uterino.

Por: REDACCIÓN SALUD

Foto: SUMINISTRADA

Fecha: lunes - 25 marzo - 2019