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En Ibagué, el 30% de subsidios de vivienda que presentan los compradores de vivienda son asignados a través de cajas de compensación de trabajadores de Bogotá: Compensar y Colsubsidio.
Ese es el principal indicio que tiene la Cámara Colombiana de la Construcción, Caracol regional Tolima, para la importante participación que tienen los compradores foráneos en la venta masiva de vivienda en la ciudad.
Sandra Forero, presidenta nacional de Camacol, sostiene que Ibagué es muy atractiva para muchas personas de afuera, principalmente de Bogotá, que vienen con la intención de adquirir propiedad raíz en Ibagué.
«Hay muchos jóvenes profesionales en Bogotá con sueldos de entre 2’000.000 y 3′.000.000 millones que quieren invertir, pero con lo costosa que es la propiedad raíz allá, jamás podrían”, explica Forero.
Agrega que estas personas deciden seguir viviendo con sus padres, un lugar donde sus gastos son mínimos, para ahorrar y luego invertir en propiedades en pueblos o ciudades menos costosas que Bogotá, en donde la capital del Tolima se convierte en una de las más apetecidas.
“Es que no sólo se trata de viviendas más económicas, la distancia también es un gran plus para que estas personas de afuera tomen la decisión de comprar. Sólo de Soacha a Ibagué hay dos horas de distancia, sin necesidad de recurrir a viajes en avión”, argumenta Forero.
Por su parte, Veliz Alfonso Mejía, presidente de la junta directiva de Camacol en el Tolima, indica que aunque todavía no se cuenta con estudios que proporcionen cifras concretas sobre cuántos foráneos y con que características compran propiedad en esta ciudad, sí se ha identificado que hay un alto porcentaje de personas que buscan aquí un sitio de descanso.
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“Está aquel que quiere adquirir propiedad para tener un sitio de recreo los fines de semana”, refiriéndose a aquellos que se inclinan por tener un lugar con piscina y canchas para descansar y divertirse.
Ibagué, una de las ciudades más rentables para el mercado de la construcción
A pesar de que construcción en Colombia ha perdido fuerza y son menos quienes se aventuran a invertir en su casa propia, en Ibagué la historia es diferente. Hasta diciembre de 2013 se ejecutaron 43 proyectos, mientras que en el presente año se duplicó esa cifra con 107 construcciones.
“En todo el país lo único que creció fue la vivienda social, de resto el sector de construcción bajó, pero si uno mira Ibagué, en todos los segmentos hubo crecimiento, no influyó el ajuste en la economía que vive el país” afirma la presidenta nacional de Camacol.
De hecho, asegura que, contabilizando doce meses, desde enero de 2017, las ventas han aumentado el 20, 9% en VIS (Viviendas de Interés Social) y el 32,2 % en No VIS (viviendas diferentes de interés social), esta última generalmente es adquirida por familias clase media que invierten entre $ 105 y 340 millones de pesos.
Y es que hace cinco años en la ciudad se vendían alrededor de 900 viviendas, pero, actualmente, las cifras van de 4.200 a 4.800. Números que aventuran a Forero a decir que la proyección de venta este año es de 179.000 viviendas, 6.000 más que el año pasado.
