El embarazo en niñas y adolescentes es uno de los problemas de salud pública más preocupantes de la ciudad. Solo en lo que va corrido del año, en Ibagué se han presentado 912 casos de jóvenes entre los 15 y los 19 años que resultaron embarazadas, mientras que otras 29 niñas entre los 10 y los 14 años también se encuentran en estado de gestación.
De acuerdo con cifras entregadas por la Secretaría de Salud, durante los últimos seis años, en la capital del Tolima se han presentado 11.559 casos de jóvenes y niñas menores de 19 años que resultaron embarazadas.
No obstante, teniendo en cuenta los últimos seis años, la peor cifra de embarazos adolescentes se presentó en el 2010, cuando 1.884 jóvenes entre los 10 y los 19 años estuvieron en estado de gestación. Esto significa que ni las políticas públicas, ni el sistema educativo ni la institución familiar han sido exitosas en el tema de la prevención del embarazo precoz.
Y es que el año pasado, por ejemplo, se presentaron 1.618 embarazos en este grupo poblacional de niñas entre los 10 y los 19 años de edad. Frente a esto, también es importante resaltar el factor cultural en el que los temas relacionados con la sexualidad son todavía un tabú.
De acuerdo con Ingrid Chiribí, psicóloga de Profamilia, los embarazos en esta población suceden, por lo general, por falta de información sobre los métodos de planificación familiar y sobre todo por no conocer su uso correcto. (Ver: VIH, una amenaza real para los jóvenes de Ibagué)
“Se tienen falsas creencias sobre los anticonceptivos, mitos en torno a ellos y hasta temor por los efectos secundarios que pueden tener algunos. Pero lo principal es la falta de conocimiento sobre cómo utilizarlos correctamente”, afirma.
De igual forma, entre 2011 y 2014 fueron 7.086 jóvenes embarazadas. Sin embargo, estas cifras no miden el impacto social, económico y hasta sicológico por las que atraviesa una joven y su familia en estos casos.
“Los jóvenes cada vez más inician su actividad sexual a temprana edad. Esto, sin el conocimiento de sus padres. Por eso es tan importante que se hable de manera clara sobre el tema, sin creer que se está incitando a una vida promiscua”, asegura la profesional.
Además de ello, es preciso destacar la importancia de que los adolescentes reciban información verídica sobre temas relacionados con la sexualidad, ya que, según Chiribí, dentro de los grupos se extienden mensajes erróneos que pueden provocar embarazos no deseados.
“Por ejemplo, está de moda la pastillas del día después. Las niñas las utilizan sin saber cuales son las consecuencias y cómo se debe usar. También es común escuchar sobre métodos que no tienen ninguna evidencia científica como tomar alkaseltzer y una aspirina después de la relación sexual”, añade.
¿Políticas públicas?
Ante esta preocupante situación, este portal habló con Valentina Salazar, secretaria de Salud de Ibagué, quien insistió en que la administración municipal actualmente está adelantando campañas que giran en torno a la educación sexual y a la prevención de los embarazos adolescentes.
«Vamos a tener diferentes estrategias para comaprar cuál es la más efectiva. Por ejemplo, organizaremos un concurso llamado ‘Mi cuento no es ser mamá’, en donde los jóvenes tendrán que realizar una campaña comunicativa relacionada con la prevención de embarazos adolescentes. Todo eso lo haremos a través de una emisora que tenga un alto reconocimiento entre los jóvenes, y los ganadores recibirán un incentivo. Los resultados los reproduciremos en vallas, pancartas y pasacalles de la ciudad», dijo Salazar.
Y continuó: «También vamos a trabajar con unos grupos de jóvenes para que ellos mismos hagan su proyecto de vida, todo eso para que ellos se identifiquen como líderes y generen habilidades. Las asesorías son prestación de salud de nivel individual. Nosotros hacemos promoción de la salud y prevención a nivel colectivo«, afirmó la funcionaria.
Así pues, es importante señalar que instituciones como Profamilia realizan asesorías gratuitas para los jóvenes que quieran información completa y veraz sobre métodos anticonceptivos y derechos sexuales. Contrario a lo que se cree, no se necesita ser mayor de edad, ni ir acompañado, para acceder a estas charlas.