El gobernador Óscar Barreto entregó este sábado el remodelado puente que comunica a Ibagué con el corregimiento de El Totumo, en el marco del cumpleaños de la capital del Tolima.
En esta obra, la administración departamental invirtió $6.600 millones, no solo en la construcción del nuevo puente sino en la rehabilitación de tres kilómetros de la vía entre Ibagué y este turístico corregimiento.
Como novedad, el nuevo puente tiene un andén de 1,50 metros de ancho en cada extremo, baranda metálica con protección para los peatones e iluminación y señalización adecuada.
Al acto de inauguración, el gobernador Barreto convocó a líderes de toda la ciudad y pronunció -como era de esperarse- un discurso en el que criticó duramente al alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, aunque sin mencionarlo. (Ver: «Yo a Ibagué le entrego obras, no regaños», nueva indirecta de Barreto a Jaramillo)
En primer lugar, dijo que los mandatarios deben preguntarse todos los días qué es gobernar y entregó su propia definición.
«Para mi la definición de gobernar es ejecutar, generar resultados. Gobernar no es armar polémicas, gobernar no es maltratar a los ciudadanos, gobernar no es expresar fanatismos ideológicos, que tanto daño le están haciendo no solo a Colombia sino al mundo entero», expresó Barreto.
Luego, afirmó que la inauguración de este puente no tenía como propósito desafiar a la Alcaldía de Ibagué, aunque para muchos sí se trató de un ‘golpe’ político aprovechando que la administración de Guillermo Alfonso Jaramillo no tenía ninguna obra para entregar.
«Yo no vengo a entregar esta obra en la ciudad de Ibagué ni para retar a nadie, ni desafiar a nadie; a la única que desafío y persigo es a la pobreza, que hay que derrotarla con el profundo amor y el más grande criterio democrático», sostuvo.
Al concluir su discurso de 18 minutos, Barreto anunció que seguirá entregando obras en Ibagué como la recuperación total de la vía que comunica a El Salado con San Bernardo, la carretera al Cañón del Combeima y el corredor que une a El Totumo con Rovira.
Finalmente aseguró que él logró ganarse el corazón de los ibaguereños desde hace mucho tiempo y que no necesita «repartir sillitas individualmente a ver si los logran conquistar», refiriéndose a la entrega de sillas Rimax que viene haciendo la Alcaldía de Ibagué a las juntas de acción comunal de la ciudad. (Ver: Jaramillo y Barreto, generosos con los líderes en época preelectoral)
«Ustedes no tienen un gobernador para salir a cazar peleas en cada esquina (…) Tampoco los invito a conciertos ni borracheras, sino a la entrega de obras«, remató Barreto, ante más de 300 personas lo acompañaron a la inauguración del puente de El Totumo.