Apuntes sobre la ciudad

Por: LILIAN CASTRO VILLARREAL

El mundo hoy por hoy es de ciudades. Las ciudades empiezan a jugar un papel muy importante en el contexto de la globalización, pues más allá del Estado, esta se configura como un territorio complejo de interacciones sociales que requiere “reinventarse”.

Esta fue una de mis  conclusiones después de escuchar expertos y de conocer diferentes experiencias orientadas a repensar la ciudad en el Foro Urbano Mundial, que se llevó a cabo en Medellín. Allí, se insistió en la necesidad de ciudades más equitativas, incluyentes, sustentables y en las cuales prime el individuo.

Construir ciudades equitativas significa construir ciudades con igualdad de oportunidades y que generen progreso y bienestar para todos. Reducir la pobreza no es suficiente, pues esto no necesariamente implica reducir las desigualdades sociales. Si bien una de las desigualdades más comunes está dada por el ingreso, esta no es la única que incide sobre la desigualdad.

Una ciudad equitativa es aquella que a pesar de la diferencia es capaz de garantizar bienestar. Es una ciudad donde mujeres, hombres, niños y niñas, adultos mayores, discapacitados, madres cabeza de hogar, minorías étnicas y cualquier grupo poblacional tiene un lugar para su desarrollo pleno y es una ciudad donde la salud, la educación, la movilidad, la seguridad, el empleo, el espacio público, la vivienda y demás son pensados para este mismo fin.

Una ciudad sustentable económica, social y ambientalmente es una ciudad con capacidad de transformarse, reinventarse y adaptarse a los cambios. Es una ciudad donde no hay lugar para la exclusión y la marginación, es una ciudad planificada. Se planifica para la equidad, para la igualdad de oportunidades y para vivir en armonía y equilibrio con el medio ambiente desarrollando además políticas para preservarlo, es una ciudad que recicla, con amplias zonas verdes, espacio público justo y suficiente.

Para planificar una ciudad sustentable son necesarios gobiernos y ciudadanos informados, pues la información se convierte en una oportunidad para enfrentar los problemas. En una ciudad sustentable el gobierno trabaja de manera coordinada y comprende las necesidades de la población, está dispuesto a priorizar de acuerdo con estas y no con sus clientelas políticas, consecuentemente, es una ciudad donde los habitantes confían en los gobernantes.

Una ciudad sustentable planifica de manera eficiente su territorio, tiene regulaciones claras sobre los derechos de la propiedad privada, la cual debería tener una función social. Una ciudad sustentable es aquella donde los ciudadanos sin distinción alguna tienen los medios, las herramientas y las facilidades para incidir en las decisiones que los afecten. Una ciudad sustentable es aquella que progresa sin eliminar las posibilidades de desarrollo para las generaciones futuras.

Ahora bien, ¿Son conscientes los gobiernos de lo que esto implica? ¿Son conscientes los ciudadanos de cuál es el papel que jugamos en la construcción de ciudades equitativas y sustentables? ¿Está preparada Ibagué para reinventarse y planificarse con equidad y  sustentabilidad?

Politóloga.

Foto: ELOLFATO.COM

Fecha: domingo - 27 abril - 2014