La Semana Santa además de ser una época de recogimiento y entrega espiritual para muchos, es también el tiempo en el que las águilas cuaresmeras arriban al Cañón del Combeima, uno de los destinos que hace parte de la ruta migratoria de estas aves provenientes de Estados Unidos y Canadá.
Muchas de estas aves no logran salir del Cañón y llegar a su destino final, pues son cazadas de manera indiscriminada por quienes argumentan que su carne tiene sabor a pescado y es idónea para consumir en este tiempo de cuaresma.
Janeth Campos, una habitante del Cañón del Combeima pide a las autoridades ponerle un alto a los cazadores. Dice que año tras año la situación se repite y no se toman acciones contundentes para frenar la desaparición de las águilas en su paso por Ibagué.
“En esta época llegan las águilas cuaresmeras que son migratorias, ellas vienen de Norteamérica y los cazadores empiezan a hacer presencia. El año pasado, nos mataron muchas aves y por eso estamos denunciando que en la mañana de hoy en la zona del ‘Cai’ ya habían personas cazando estas aves. Es importante que la Policía, Cortolima, todas las autoridades y entidades nos ayuden a evitar que estas personas cometan este desastre ambiental”, expresa Janeth con angustia.
Ante la denuncia, Cortolima emitió un comunicado de rechazo a las posibles acciones de caza que se están adelantando en esta zona rural de Ibagué. (Ver: La historia del águila cuaresmera que liberó Cortolima)
“Cortolima como autoridad ambiental rechaza cualquier tipo de caza, en particular de estas aves que llegan hasta el Cañón del Combeima a descansar, luego de su larga travesía del sur del continente”, señala el documento.
El director de la Corporación Jorge Enrique Cardoso, invitó a la comunidad del Cañón a denunciar la caza de las aves y reportar cualquier situación irregular.
“Con gran preocupación, empezamos a reportar llamadas telefónicas de comunidades que viven en al área denunciando la presencia de cazadores (…) Hacemos un llamado a los campesinos y presidentes de juntas de acción comunal a que estés muy atentos a que sepan y divulguen que la cacería en el departamento del Tolima y en territorio colombiano está totalmente prohibida y constituye un hecho punible por ello en caso de que nosotros con el acompañamiento de las autoridades podamos capturar a un cazador este debe afrontar todo el peso de la ley”, aseveró Cardoso.