Desde los primeros días del mandato de Luis H. Rodríguez como Alcalde de Ibagué no cesan los actos administrativos poco transparentes, los incumplimientos del programa de Gobierno, los fracasos del Acueducto Alterno y las viviendas del Tejar sin agua, el fallido intento de entregar a un privado el cobro del alumbrado público, la equivocada tentativa de vender el complejo deportivo de las piscinas, la compra sobrefacturada de una finca en la vereda Toche, el alquiler a terceros de los bienes inmuebles de la Unidad Médica del Sur, la entrega, a un solo y cuestionado proponente, los servicios objeto de la existencia de la empresa de acueducto IBAL, los viajes improductivos al exterior, sin solución aún el Sistema Estratégico de Transporte que financiaría la Nación, la indebida destinación de recursos al contratar, otra vez con único proponente por 11.500 millones de pesos, unos diseños de escenarios para los Juegos Nacionales 2015 y continuando con su interminable lista de desaciertos aparece con el escandaloso proyecto de “las foto-multas”.
¿En qué consiste el proyecto denominado “Operación de la Detención Electrónica y Complementación para la Seguridad Vial y el Mejoramiento de la Movilidad de Ibagué” o simplemente de las fotomultas?
Es una autorización solicitada por el Alcalde Luis H Rodríguez y otorgada por el Concejo Municipal para contratar por concesión la instalación de 22 cámaras fijas y 2 móviles, recaudar las multas impuestas por las infracciones registradas, realizar cobros persuasivos y adelantar acciones jurídicas contra los usuarios morosos.
Las cámaras de detección de velocidad serán instaladas en las vías de mayor flujo vehicular, registrarán cada una un promedio de 3 infracciones por hora durante 12 horas. El resultado dará 792 comparendos por día.
De acuerdo con el estudio presentado por el Alcalde, el Capitulo Financiero revela que se producirán 23.760 multas por mes, para un total de 285.120 por año. A un valor promedio de $294.750 por multa y con el actual parque automotor de Ibagué, que registra 36.500 automóviles, 65.000 motocicletas y cerca de 5.000 vehículos entre buses, camiones, busetas, microbuses y tractocamiones, se proyecta un recaudo de $58.827 millones, solo para el primer año, después de descartar el 30% de difícil cobro.
22x3x12 = 792
792×30 = 23.760
23.760x 12 = 285.120
285.120x 294.759 = $ 84.039.120.000
84.039.120.000×70% = $ 58.827.384.000
¿Y en qué consiste el “negocio” por el cual la comunidad ha manifestado su rechazo a la iniciativa del Alcalde?
Veamos: dice el mencionado estudio (Capitulo Costos de Funcionamiento y de Inversión del Proyecto), también lo afirmaron los funcionarios encargados de la sustentación ante el Concejo de Ibagué y se difundió en distintos medios de comunicación, que el valor de la inversión inicial será de $5.644 millones más $ 1.071 millones por el costo anual de trabajadores y administración.
Sin bases demostrativas, ni estudios comparativos, ni ejercicios de muestreo o proyecciones estadísticas, concluye el estudio que el Recaudo Anual Inmediato será de $ 17.648 millones que corresponderán al 30% del monto inicial de multas, que del restante se recuperara con descuento el 50% y los demás por cobro coactivo. Del monto final de recaudos el 60% le corresponderá al inversionista y el 40% al municipio de Ibagué que deberá a su vez cancelar el 5% a un interventor seleccionado por el Alcalde.
En resumen, con una inversión inicial de 5.644 millones de pesos, el dueño de la concesión recibiría en el primer año cerca de 11.500 millones de pesos y el interventor, por revisar los informes de la Fiducia y del contratista, tendría un ingreso no menor a 600 millones de pesos por año.
El inversionista o concesionario recuperaría su inversión en tan solo el primer año de operación, por lo tanto no quedando claro por qué operaria entonces durante 20 años; “mal negocio” para la ciudad.
Por las protestas y críticas escuchadas, el Alcalde reconoció que el estudio estaba mal elaborado y que no lo tendría en cuenta para contratar, igualmente la funcionaria encargada del Tránsito Municipal afirmó que “la realidad era diferente al estudio” pero aun así, con el estudio descalificado, el Alcalde rodeado de sus subalternos sancionó el Acuerdo que lo faculta para concesionar hasta por 20 años el proyecto de fotomultas.
Revisando el Programa de Gobierno por el cual fue elegido Luis H Rodríguez como Alcalde, el proyecto de las fotomultas nunca fue incluido ni contemplado en la campaña.
En cambio sí propuso más y mejores vías de circulación, nuevas avenidas, construcción del Sistema Estratégico de Transporte Público, seguridad vial con preferencia por la cultura ciudadana a la que llamo “Camino a la Seguridad Humana”. En el Plan Municipal de Desarrollo 2011-2015 elaborado por el Alcalde y aprobado por el Concejo Municipal tampoco existe referencia a una posible concesión o montaje de fotomultas.
Ahora bien, en septiembre del año 2013, hace 9 meses, el Ministerio de Transporte hizo entrega al Alcalde del PLAN LOCAL DE SEGURIDAD VIAL PARA IBAGUE-PLSVI, elaborado por Fonade previo convenio firmado entre Luis H Rodríguez y el Ministerio.
En este importante y bien elaborado informe se recomienda a la Administración Municipal mejorar la red de semáforos, aumentando su número, modernizando la sincronización automática y cambiando los postes de sostenimiento, también concluye el PLSVI que es necesario instalar más y mejores señales de tránsito para conductores y peatones, mejorar las vías y construir cruces e intersecciones.
Ignorando este costoso y bien realizado estudio, que busca mejorar la seguridad vial y la movilidad, el Alcalde está decidido a multar a motociclistas y conductores sin antes haber preparado la ciudad con campañas educativas, como se lo ha exigido la comunidad y como lo indican estudios serios del orden nacional.
Además de cifras alegres y argumentos sin estudios comparativos o retrospectivos, parece una burla algunos de los presentados en el Capítulo titulado “Impacto Social del Proyecto”: “Fomento del sentido de pertenencia de los habitantes para con su Ciudad y el cuidado de la misma. Mejora de la imagen e incremento de la credibilidad de la Administración Municipal ante los ojos de los habitantes…”
¿En serio? ¿Será que la falta de transparencia administrativa crea sentido de pertenencia y aumenta la credibilidad y la confianza en alguien? Dicho de otra manera, el Alcalde de Ibagué quedó listo pa’ la foto.